Carta A Un Extraño

Carta a un Extrao Querido....no se cmo llamarte En aquel tiempo, cuando apenas mi corta edad me permita ver el mundo por primera vez, te puse un apodo, algo fcil de recordar y de pronunciar para misnefitos labios al poco tiempo las palabras fluan con mayor rapidez y claridad permitindome articular esa palabra de cuatro letras que en ese tiempo significaba proteccin...seguridad...admiracin, esapalabra que hace tan solo unos meses se volvi como un irremediable tab. Hoy no s como llamarte, porque perd el significado de esa palabra, que al escucharla incluso de aquellos extraos, un dolorpunzante acribilla el lado izquierdo del cuerpo...dice mi doctor que ah se encuentra el corazn, y un mareo incesante que comienza en la cabeza...dice mi psiclogo que ah se encuentra la razn parece ser quetodo mundo sabe donde se encuentran las cosas...pero yo no s donde dej tu nombre. Lo he buscado entre los pedazos de lo que antes se deca un corazn y donde tu huella qued viva, lo he buscado enaquellos mares salados a los que creo les llaman lgrimas y que t provocaste que se convirtieran en ocanos, lo he buscado hasta en ese rincn de la habitacin donde se encontraban tus cosas y que ahora soloqueda un vaco...y an as no soy tan buen detective para darme cuenta que ni tu sabas como llamarte. Te llevaste esas cuatro letras sin darte cuenta que no solo eran vocales ni consonantes que meensearon en la escuela para poderte llamar, si no que eran la representacin misma de un sueo, de una creencia, de un amor...como un huracn arrasaste con todos los cimientos de lo que una vez creconstruido, te llevaste las races de esos rboles que pens comenzaban a dar frutos, avanzaste con furia ante el reto de la fortaleza demostrada sobre tus palabras y te fuiste con indignacin al mostrarme laespalda y, que con la mano tendida, me obligaste a seguir mi camino. Creo que tu mayor coraje no fue el verme derrotada al no encontrar tu nombre, si no que mas bien t perdiste el significado del mismo...