Carta

lonso Arroyo
KPMG
Los pagos por ingresos de fuente costarricense hechos a no domiciliados están normalmente sujetos a impuestos de remesas al exterior. Tratándose de arrendamientos de bienes decapital, la retención normal aplicable es de un 15%. Sin embargo, se concede una exención cuando se está en presencia de arrendamientos de bienes de capital, utilizados en actividades industriales oagrícolas y se cumple con los requisitos señalados en la ley.
En La Gaceta del 28 de junio pasado se publicó una reforma al artículo 64 del Reglamento a la Ley del Impuesto sobre la Renta, que contienelas normas relacionadas con el impuesto de remesas al exterior en lo concerniente a arrendamientos, intereses, comisiones y gastos financieros.
El inciso c) del artículo 64 anterior (que regulaba lorelacionado con el arrendamiento de bienes de capital) no hacía referencia específica a que dichos pagos fueran hechos a instituciones reconocidas por el Banco Central, como instituciones de primerorden.
Dicha regulación ha sido objeto de extenso debate, ya que la tesis de la administración tributaria había sido que los pagos debían ser hechos a instituciones reconocidas por el Banco Central,pese a no estar específicamente señalado en el inciso c), pero sí en otros párrafos e incluso en la misma ley.
Cualquier espacio para interpretación en cuanto a si el pago debe ser hecho a institucionesreconocidas por el Banco Central, queda cerrado con la reforma al artículo 64 citado, en lo que, según el considerando de la reforma, debe ser la interpretación correcta del artículo 59 de la Ley delImpuesto sobre la Renta que reglamenta el mencionado artículo 64.
Pero el asunto no termina ahí. Según interpretación hecha hace unos años por el Tribunal Fiscal Administrativo lo correcto es tenerese requisito como inexistente.
Desde una perspectiva práctica, parece ser necesario algún cambio en el tema. Caso contrario, estaríamos frente a una exención inoperante en la práctica por un...