Casa De Muñeras

Sobre Casa de Muñecas de Ibsen

Uno de los momentos que inaugura el teatro: Nora le pide a su marido que se siente porque quiere conversar de verdad, hablar sin velos por primera vez en su “Casa demuñecas” (1879) de Ibsen. Ruptura con un sistema de vida que otorga la autoridad y la responsabilidad social al hombre (primero al padre, luego al esposo), tomando a la mujer como “muñeca” que mimary proteger: bella, adorada, pero un “objeto” (y un juego grato para el hombre en su hogar, aunque éste se permite vivencias más apasionadas fuera del recinto familiar, con mujeres “fáciles”, también“muñecas”, pero de mala vida”) sin libertad, sin poder de decisión. [...]

De: “Ibsen a Gabo”. Artículo de Ricardo González Vigil en El Comercio del 13 de noviembre de 1994.

El hereismo no tienenada que ver con el masoquismo. El adorador de la mujer no siente el menor deseo de ser su esclavo ni de ser humillado por ella, física o espiritualmente. Al revés, la considera incapaz de hacer dañoa nadie, porque es un ser lleno de ternura y comprensión. El masoquista, por el contrario, se enamora de la mujer que puede hacerle daño físico o mental. Y, a veces, ni siquiera la ama, pues sesomete a ella con el solo propósito de recibir el castigo que ,o conduce al éxtasis sexual. [...]
Puede pensarse que el hereista es un enamorado del amor. Pero este tipo de enamoramiento tampocosignifica algo para él. Hay, sí, hombres y mujeres enamorados del amor. Por lo general nunca encuentran lo que buscan, pues una vez que son correspondidos, el amor cobra realidad y la realidad es siempremuy diferente del mundo ideal. Los enamorados del amor son como los grandes exploradores que sólo son felices cuando están explorando pero que, una vez llegados a la meta, ya sólo piensan en lapróxima exploración.
El hereista, en cambio, sólo se enamora de mujeres reales. Como tiene en tan alta estima la condición femenina, cuando se enamora de una mujer y ésta lo acepta, siente una...