Caso Aguas de Cartagena

ESCUELA DE ADMINISTRACIÓN
Curso: Gestión Pública

Caso: Aguas de Cartagena

El día que llegó el agua
Lo llamaban el burroducto. Hasta hace pocos años era la única manera de
obtener agua potable para decenas de miles de personas que viven en las
empinadas colinas que bordean la histórica ciudad caribeña de Cartagena.
Vendedores informales llenaban grandes contenedores de agua en la zona baja
dela ciudad y luego los transportaban a lomo de burro a través de barrancas
erosionadas hasta llegar a los barrios marginales. Allí vendían el agua a los
más pobres a precios varias veces superiores a lo que pagaban las familias de
altos ingresos que estaban conectadas a la red municipal de agua.
Mi familia pagaba 3,000 pesos por día (unos 40 dólares al mes) por el agua del
burroducto, recuerdaDelfina Díaz Pereyra. Nacida en Loma Fresca, uno de los
grandes barrios ubicados en los márgenes de la ciudad, Díaz se convirtió en
1995 en una especie de activista del agua. Me cansé de esperar a que el
municipio instalara el servicio de agua en mi casa, recuerda. Así que empecé a
aparecer en la oficina del alcalde para exigir explicaciones.
Las autoridades de la ciudad le dijeron que no podíanextender la red hasta su
barrio porque estaba en una zona muy empinada y hacerlo se consideraba
inversión de alto riesgo. Eventualmente, Díaz se enteró que la ciudad había
firmado un contrato con la firma española Aguas de Barcelona para formar una
nueva empresa con el objetivo de mejorar el servicio. Como otros
cartageneros, Díaz tenía dudas sobre el acuerdo. Cuando la nueva empresa denominada ACUACAR-abrió sus puertas, Díaz y miles de frustrados
residentes atestaron sus oficinas en demanda de mejoras inmediatas. Me
dijeron que no iban a poder instalar el servicio por seis años más, debido a
todo el trabajo pendiente que debía hacer, recuerda Díaz. Pero sí me
prometieron que iban a enviar carrotanques de inmediato.
Estos camiones de agua abastecieron a Loma Fresca con agua por mucho
menos delo que cobraba el burroducto y, seis años después, la empresa
cumplió con lo prometido e instaló conexiones domiciliarias de agua en toda
Loma Fresca. Hoy, Díaz paga aproximadamente 8 dólares mensuales por el
agua potable que recibe las 24 horas del día. Pueden hablar lo que quieran,
dice Díaz, pero lo cierto es que los españoles nos resolvieron el problema.
Una estrategia flexible
Díaz es unaentre casi un millón de personas que han sido conectadas
recientemente a sistemas de agua y alcantarillado en ciudades a lo largo de la
costa atlántica de Colombia, una zona que era famosa por sus problemas
sanitarios.
En Cartagena, la segunda ciudad más grande de la región, se han invertido
cerca de 236 millones de dólares en infraestructura de agua y saneamiento
durante los últimos 10 años. SegúnACUACAR, 98% de los residentes ahora

cuentan con conexión de agua en sus casas y casi el 90% tiene acceso al
alcantarillado (en comparación con 73% y 60%, respectivamente, en 1995). La
presión de agua, anteriormente tan baja que la mayoría de la gente sólo
recibía agua unas pocas horas al día, hoy es suficiente para proveer servicio
continuo en casi toda la ciudad. Y dentro de tres años, ACUACARhabrá
terminado de construir plantas de tratamiento capaces de procesar 80% de
las aguas residuales de la ciudad.
Estas cifras serían impresionantes en cualquier contexto, pero son
especialmente notables en una ciudad como Cartagena, donde el 85% de la
población está clasificada como pobre. Dado que las clases pudientes ya
contaban con un servicio de agua decente, casi todas las inversiones deACUACAR han sido enfocadas en las áreas de bajos ingresos. Y en contraste
con algunas otras ciudades de América Latina, donde la inversión privada en el
sector agua ha provocado una fuerte oposición pública, en Cartagena la
empresa de agua goza de amplio apoyo popular.
¿Cómo se explica la singular experiencia de Cartagena? La respuesta surge de
una novedosa estrategia del gobierno colombiano que...