Casos Clínicos

CASO CLÍNICO FETICHISMO

Cuando tenía 13 años, Corky Brauner encontró un par de pantaletas de su hermana mayor que su madre había colocado por error junto a su ropa interior.Estaban bordadas con flores y con la palabra “sábado”, y él las encontró peculiarmente excitantes; durmió con ellas debajo de la almohada por un par de noches y se masturbó con ellasun par de veces antes de regresarlas a la gaveta de su hermana el viernes por la noche. De vez en cuando, durante toda su adolescencia, cuando estaba solo en casa, Corky seapropiaría de diversos objetos de ropa interior de su hermana.

Cuando fue a la universidad, vivió sólo, por lo que le fue posible coleccionar y guardar un pequeño armario de lenceríasin preocuparse por ser descubierto. Aunque poseía algunos brassieres y algunas fajas, él prefería las pantaletas.
Para su último año, ya tenía varias docenas. Algunas de
estasprendas las había comprado, pero prefería las de mujeres con las que había salido y las había convencido de que se las dejaran. De hecho, hasta había robado 1 ó 2 de los tendedores deropa, pero era peligroso y no lo hacía a menudo.

Cuando Corky estaba solo, lo cual era muy seguido, sacaba una o más pantaletas de la gaveta y jugaba con ellas. Le gustabaolerlas, frotarlas en su cara y masturbarse con ellas. Durante estas actividades, se imaginaba que hacía el amor con la propietaria original de las pantaletas. Si no la conocía, seimaginaba como se vería.

Corky decidió ir a tratamiento por la carcajada de su novia más reciente cuando se dio cuenta de que tenía que poner su ropa interior debajo de su almohadapara poder tener una erección cuando hacía el amor. “Tenía una fijación total con las pantaletas”, dijo durante la primera cita. “parece que prefiero las pantaletas a las mujeres”.