Castañer

L
uis Edgardo Díaz Hernández, autor de CASTAÑER, nos presenta el surgimiento y decaimiento de una de las mayores haciendas en la isla. No obstante, para poder entender los sucesos que llevaron al auge del café y como CASTAÑER formó parte del Coloso Cafetalero cabe destacar acontecimientos históricos. Bajo la reconquista y colonización, por España, Puerto Rico (PR) sufrió vastos cambiossocio-políticos, económicos y culturales. Durante las primeras décadas de colonización, los españoles llevaron a la población taína al exterminio y motivo por el cual se vieron obligados a traer mano de obra esclava (negros), denominado como la “cultura de los opresores y la cultura de los oprimidos”, según José Luis González en EL PAIS DE LOS CUATRO PISOS. Datos históricos demuestran que para el 1560la isla poseía una población de 15 mil esclavos y comenzaba una economía en la industria de la azúcar.
Bajo España y cito: “durante los tres primeros siglos de dominación española en la Isla, España mantuvo una política restrictiva y prohibitiva hacia los extranjeros” (Estela Citro de Loubriel). A principios del siglo XIX, la primera oleada inmigratoria “volcó sobre la Isla un nutridocontingente de refugiados de las colonias hispanoamericanas en lucha por su independencia, al amparo de la Real Cédula de Gracias de 1815” (José Luis González). La Cédula de Gracias imponía a los extranjeros (ingleses, franceses, holandeses, irlandeses, etc.) la obligación de domiciliarse durante tres meses o abandonar el país, en la que juraban lealtad al rey de España y firmaban el acta de Fé decatolicidad. A mediados de siglo “la colonización en la región montañosa” surge por la llegada de una nueva oleada compuesta fundamentalmente por corsos, mallorquines y catalanes, los cuales produjeron una cultura señorial y extranjerizante. “El mundo de las haciendas cafetaleras fue un mundo dominado por extranjeros cuya riqueza se fundó en la expropiación de los antiguos estancieros criollos y enla explotación despiadada de un campesino nativo que había vivido de una economía de subsistencia” (José Luis González).
En la década de 1820 el café comenzó a ser aceptado en los mercados europeos y el auge de sus precios así como, el Régimen de la Libreta de jornaleros dio origen a la fundación de las haciendas cafetaleras. La Libreta estuvo vigente durante 24 años y establecía lo siguiente:(1) declaraba jornalero a toda persona entre 16 a 60 años que no tuviera industria u oficio y los estancieros debían poseer títulos o de arrendamiento de propiedad no menos de cuatro cuerdas para no ser declarados jornaleros, (2) los jornaleros tenían la obligación de estar empleados en todo momento sino eran destinados a obras públicas, (3) los jornaleros debían cargar con una libreta expedidapor las autoridades a todo momento, en esta el patrono anotaba su salario, su conducta e información pertinente para que fuera revisada por las autoridades un domingo al mes, (4) a partir de un año se prohibía el agrego después de haberse puesto en vigencia y (5) los jornaleros del campo debían mudar sus casas al pueblo para ser controlados por las autoridades. Las epidemias, como el cólera y laviruela, y según avanzaba el siglo XIX, mostraban un rostro débil y enfermizo del jibaro. La Libreta llego a su fin en 1873, año en el que se abolió la esclavitud, “dejando un cuadro patético y desconsolador” (Francisco A. Scarano). No es hasta el 1876- 1889, últimos 22 años de la dominación española, que surge el Auge cafetalero y denominado como la “EDAD DE ORO”. Sin embargo, la edad de orotrajo prosperidad para unos pocos mientras tanto, miseria y explotación para los residentes de la zona cafetalera. Yauco, Adjuntas, Lares y Utuado son los municipios que comprende la región cafetalera de Castañer.
Aunque la demanda de brazos posibilitó el “nuevo agrego” y un mercado de trabajo activo en los municipios cafetaleros se impusieron exigencias. Todos los miembros de las familias...