Cien años de soledad

Cien Años de Soledad




Fueron muchos los pensamientos sin orden, muchas las imágenes y muchas las sensaciones que tuve cuando termine el libro Cien años de Soledad, que ha sido quizás el libro mas eterno que he leído en mi vida. Durante la lectura, y la verdad más que una lectura fue un viaje donde presencie el nacimiento del mundo mismo, en el momento en el que José Arcadio Buendía, comopromesa a su fallecido enemigo Prudencio Aguilar, partió del pueblo donde vivía con su esposa y prima, Úrsula Iguaran, y fundó Macondo, el pueblo con nombre de sueño. El mismo autor me hizo ubicar en el tiempo y en el espacio, para darme cuenta que el “mundo era tan nuevo que había cosas que no tenían nombre y había que señalarlas con el dedo”. [1]

Fue en este pueblo que inicio la historia delos Buendía, una familia que se dedico a reproducirse en vez de amarse desde sus mismos cimientos. El primer hijo de José Arcadio Buendía y Úrsula Iguaran, fue engendrado más bien por las costumbres. A pesar del miedo que Úrsula tenia de que su descendencia tuviera cola de cerdo a causa de su pecado marital, José Arcadio creció fuerte y voluntarioso. El viaje continua a través de las vidas de losdiferentes personajes que se hacen presentes en el libro, los cuales son tantos que a veces, tuve la sensación de no conocerlos lo suficientemente bien. Pero creo que la belleza de la obra, no son los personajes en sí, ni sus características, si no los símbolos que los rodean y lo que ellos mismos representaron dentro de la historia de la familia y de Macondo, que finalmente es una analogía de lahistoria misma de Colombia y sus habitantes.

También, a medida que leia el libro y empezaba una travesia, conocí el vigor de un toro viajero y pasional: la masculinidad misma, reflejada en José Arcadio, quien le dio sesenta y cinco veces la vuelta al mundo, y sin embargo, su sangre solo quiso llegar a los brazos de una madre olvidadiza y dispuesta a perdonar. Una madre que durante toda lahistoria muestra el prototipo ideal de toda mujer.

Úrsula Iguaran, tataranieta de un aragonés, es quizás el personaje que mas me cautivo por ser una mujer tenaz. Ella es el símbolo de la mujer “berraca”, coherente con lo que dice y con lo que hace, segura de sí misma y con una vitalidad a veces confundida con perseverancia y otras con belleza. Fue ella quien estabilizo a la familia en sus momentosmás críticos, que la salvo de la bancarrota con sus animalitos de caramelo, fue ella quien parió los origines del los Buendía, y la única que se preocupo por mantener a la familia unida y arraigada sus tradiciones.



Todo esto lo vi a través de mi travesía por la historia de Colombia en Macondo, pero el momento más evidente de la “berraquera” de esta admirable mujer, fue definitivamente cuandoesta se queda ciega. Úrsula noto su falta de visión mucho antes de que José Arcadio (hijo de Fernanda del Carpio y Aureliano Segundo) naciera. Inicialmente pensó que era un mal pasajero, así que se auto medicó con remedios caseros, pero esta confirmo su eterna tiniebla al pasar el tiempo. Pronto, se hizo un estorbo para todo, sobraba en la familia y ya no era útil como antes, pero procuro quenadie se diera cuenta de que no podía ver, porque así los demás tendrían razones para llamarla inútil.

Esta mujer era tan tenaz, que desarrollo sus demás sentidos para reemplazar lo que los ojos ya no le podían brindar.

“Se empeño en un callado aprendizaje de las distancias de las cosas y de las voces de la gente, para seguir viendo con la memoria cuando ya no se lo permitieran las sombras delas cataratas. Más tarde habría de descubrir el auxilio imprevisto de los olores, que definieron las tinieblas con una fuerza mucho más convincente que los volúmenes y el color, y la salvaron definitivamente de la vergüenza de una renuncia. En la oscuridad del cuarto podía ensartar la aguja y tejer un ojal, y sabia cuando estaba la leche apunto de hervir. Conoció con tanta seguridad el lugar en...