Cinco panes de cebada

Páginas: 159 (39558 palabras) Publicado: 19 de marzo de 2014
CINCO PANES DE CEBADA
LUCIA BAQUEDANO

1

TENIA entonces sólo veintiún años, y por eso quizá me sentí tan decepcionada
cuando supe que mi destino era un pueblo.
Yo siempre había soñado con una escuela tan diferente... La veía moderna, bien
instalada, alegre... Pero la vida es así.
—Ni siquiera viene el nombre del pueblo en la Enciclopedia. Debe de ser una
birria —dijo mi hermanaSylvia, dejando así mi moral por los suelos.
Mi madre, como siempre, me animó.
—El sitio es lo de menos. Lo importante es que te sientas a gusto, y que la
gente te quiera... Para ser feliz, ¿que más da que el lugar sea grande o chico?
Pero yo pensaba de muy diferente manera. Creía que para mandarme a un sitio
así, no era necesario que me hicieran un examen tan duro, ni aquel curioso test, que
diocomo resultado que yo me encontraba plenamente capacitada para dirigir una
escuela de ciento setenta niños.
Si tan bien lo hice todo que incluso merecí la felicitación del tribunal, ¿por qué
ahora me daban una escuela en un pueblo tan pequeño? ¿Cuántos alumnos tendría?
¿Tal vez nueve?
Debí hacer estas reflexiones en voz alta, porque Sylvia se rió.
—El trabajo te dejará agotada, pero no tepreocupes. A ti siempre te ha gustado
escribir y los ratos libres puedes dedicarlos a eso. Sería buenísimo que salieras de casa
como maestra rural y volvieras con un premio literario bajo el brazo, ¿no te parece?
Pero yo no estaba para bromas. El pueblecito aquel se me había atragantado, y
estaba segura de que iba a ser algo horrible.
Lo noté en cuanto llegué a la estación y localicé el autobúsrojo y azul, sin duda
contemporáneo de Godoy, lleno de viajeros, y con el techo repleto de cestas, escobas,
un cochecito de bebé, enormes fardos de plantas, un colchón y montones de cajas de
cartón atadas con cuerdas.
Pregunté a una mujer si aquél era el coche que iba a Beirechea, con la esperanza
de que me dijera que no, pero me contestó afirmativamente, en un intervalo de su
discusión conel cobrador que pretendía subirle a la baca una enorme maleta atada
con cuerda de esparto, a la que ella se aferraba como si en ello le fuera la vida.
—Que sí, Perico... Que te digo que sí... —decía, creyéndose graciosísima y
haciendo señas a su robusto chiquillo, que se había sentado cómodamente con los
pies en el otro asiento, para que le ayudara a colocar debajo la preciosa maleta.
Mequedé en pie en aquel pasillo horrendo y esperé resignada a que el autobús
se pusiera en marcha, si es que aún andaba aquel trasto... Y anduvo, claro. Yo soy así
de desgraciada.
Y me despedí entonces de mi agradable vida de chica de ciudad. Lo último que
vi de ella fue la sonrisa de mi madre, que agitaba la mano, y sus ojos llenos de
lágrimas. Sentí un nudo en la garganta y apreté los puños confuerza.
Muy cerca de mí, la dueña de la maleta explicaba a todo el que quisiera
escucharla que no dejaba nunca el equipaje arriba porque sabía de una a la que,
por confiada, le habían robado un abrigo que valía buenos duros.

El autobús trotaba ya entre una alarmante nube de humo. Una mujer que
llevaba una cesta con dos gallinas me dijo que me sentara y me ofreció un pedazo
de asiento enel que sólo cabía una pierna.
Fue un consuelo para mi soledad, y se lo agradecí mucho, quedando así
aprisionada entre la cesta y una chica de mi edad, bastante mona, pero que tenía
pinta de empezar a marearse.
En el asiento delantero un chico, con la frente llena de mercromina, gritaba
desesperadamente para que su madre le diera no sé qué que llevaba en el bolso, y
un niño de meses completóel cuadro haciéndose pis. ¡Pues vaya un balance!
El autobús, más que rodar, brincaba, y yo procuraba encogerme por no
aterrizar encima de las gallinas o sobre la chica, que debía de estar ya fatal, la pobre.
¡Uf, y qué calor tan sofocante! Entre una cosa y otra, yo estaba hecha polvo.
Cada vez que veía un pueblo bonito, deseaba que fuera el mío, pero no tuve
suerte. El autobús paraba, sí,...
Leer documento completo

Regístrate para leer el documento completo.

Estos documentos también te pueden resultar útiles

  • Cinco panes de cebada
  • Resumen cinco panes de cebada
  • cinco panes de cebadas
  • Resumen cinco panes de cebada
  • Cinco panes de cebada
  • Cinco Panes De Cebada
  • Cinco panes de cebada
  • Prueba cinco panes de cebada

Conviértase en miembro formal de Buenas Tareas

INSCRÍBETE - ES GRATIS