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El diario de un ladrón

¡Basta ya! ¡No quiero robar más! Estas son las palabras que escribo cada noche en mi diario personal cuando hay un conflicto entre mi conciencia y mis acciones. Minombre es William Jocker y a mis 25 años ya soy un ladrón profesional. Sé que existen muchos pero nadie es como yo. Porque ninguno tuvo el privilegio de contar con el mejor maestro: mipadre, el gran Oliver Jocker, el estafador más astuto y respetado de todos los tiempos, hasta un día que un desgraciado acabo con su vida. Tal vez no era mi deseo o mi vocación ser un ladrón, perosí mi obligación porque, al igual que mi padre, no robo para mí, sino para los que más lo necesitan. La palabra hurtar puede tener diferentes significados, depende la clase de bandido que seas.No soy un saqueador de buses que mata a las personas por una miseria, eso sería quitarle una limosna a un mendigo. Yo soy un tipo con clase y no lo hago por vanidad, sino por necesidad a losdemás, ya que entre más estatus social tengo el robo es más grande.
Tengo diferentes personalidades: el árabe Abu Dúlu, el sueco Borge Wegue y el gay Ale Bush. En fin, en mi guardarropaencuentran de todo un poco. Pero se preguntaran, ¿cuál es mi verdadera personalidad? Cuando se hace de todo en la vida olvidas tu verdadera esencia. Sin embargo, no es fácil ser un maleante con estiloporque además de astucia hay que leer mucho, saber de cultura general, aprender distintas lenguas y ver diferentes programas de televisión, todo para estar bien informado y saber cómo moverte yformular ideas para ver a que rico puedes estafar, y como dicen en mi pueblo “ladrón que roba ladrón tiene cien años de perdón”.
No crean que vivo solo, no, conmigo está mi fiel compañero Max, unperro salchicha, color negro y de aspecto delgado. Cada noche que llego a mi apartamento me recibe con mucha alegría. Al parecer, todo marchaba bien, hasta esa noche que encendí mi televisor y vi la...