Circe

Una
sociedad
llamada Circe







Le preguntaron a Caldwell qué necesitaba para escribir:
-¿Estar acostado, como Dumas? ¿Papel amarillo, como Lafcadio Hearn? ¿Música, como Bacon?
-Lo que yo necesito -respondió Caldwell- es tener algo que decir.




Mensajes incomunicadores nos rodean diariamente. Los noticieros nos bombardean con sus noticias extremadamente sensacionalistas:muere joven apuñalada por una compañera en un festejo por el día de la primavera, bebé abandonada a pocas horas de nacer salva su vida milagrosamente, roban a ancianos luego de golpearlos para encontrar el dinero, protesta de trabajadores tras innumerables despidos, etc., etc.,etc. Estas “noticias” son tan cotidianas que la gente simplemente las comenta, con un alto nivel de dicotomía, alasombrarse por estas atrocidades, pero a su vez, no puede imaginar un mundo sin ello. Y lo que es peor, pareciera que expresar angustia o dolor fuese un pecado capital. Los incriminan diciendo que sus palabras forman parte de un discurso netamente racista, y en contra de los derechos humanos. ¿Derechos para quiénes? ¿Qué es ser humano?
Actualmente, los MEDIOS de COMUNICACIÓN tienen un rol amenazante ennuestra sociedad. Nombre paradójico ya que la comunicación es escasa (predomina la imagen lucrativa) y más que MEDIO se asimila al fin: fin de relaciones sociales, fin de sentimiento solidario, fin de una cultura culta, para dar comienzo a un ser individualista en el que prevalece lo material y el culto de la máquina sobre el ser: quiero lo que veo, soy lo que tengo.
Por otro lado, elsentimiento de nacionalismo y de compromiso político visto en los `70 desapareció. Pero, ¿acaso toda la gente no “habla” de lo que está bien y lo que está mal, sobre qué hacen unos pocos, lo que no hace nadie y lo que no haría yo? Como dice Ivonne Bordelois, “el mismo hablar contra la violencia, parece generar violencia”. Pero no genera acciones. Como consecuencia, vemos cómo la lengua deja de ser eseplacer sagrado para ser tomada por un simple objeto de comunicación. Esto no sólo denigra al lenguaje sino que le excluye, le quita la posibilidad de verlo como un elemento de expresión. Por otro lado, paradójicamente, esto demuestra la incapacidad del hombre de comunicarse. Parece ser que en esta sociedad postmoderna el escuchar ha pasado de moda: como podemos ver día tras día, pareciera que laspersonas ya no quieren hablar y sólo optan por las protestas, pintadas, paros, escraches, etc.
Estamos tan comprometidos con nuestra propia vida, que ya no hay tiempo para el esparcimiento. Problemas económicos, trabajo, estudio, familia, gripe A, dengue; se hablan, se desmembranan hasta tal punto donde no hay nada más que decir. O que escuchar.
Pero por otro lado, temas tabúes han empezado adejar de serlo. Padres e hijos, docentes y alumnos hablan de sexualidad y amor sin importar la edad pero sí la diferencia de valores, inculcando más la idea paterna que intentando buscar un razonamiento en común.
Ivonne Bordelois afirma que “no se trata sólo de hablar una o más lenguas, sino de saber escucharlas, empezando por la propia, que hemos aprendido a desatender a fuerza de su desgastepor el uso y abuso. Pero además hay que hacerlas dialogar entre sí.” Uno llega a saber cómo se dice una cosa en dos idiomas, y aún en diferentes modos en cada idioma, pero no sabe qué es la cosa. Es aquí cuando el hombre siente incertidumbre frente al mismo. Y lo que es aún, se siente habitado por el lenguaje y por la transformación interna que produce, teniendo la posibilidad de jugar con laspalabras, llegando a fantasear, como dice León, que cualquiera puede escribir.
Según Borges, los idiomas corresponden a las necesidades de quienes los hablan, y si a un idioma le falta una palabra es porque le falta un concepto o, mejor dicho, un sentimiento. El lenguaje no nos es suficiente, pero nos es necesario; la palabra sola no puede salvarnos, pero no nos podemos salvar sin la palabra....