ciudad y arte

Movimientos 2.0 Páez Ferreyra, Héctor
Si tengo que hacer un racconto de lo que va del año, puedo enumerar una sucesión de viajes
que me han llevado a visitar distintas ciudades, por diversos motivos; familiares, estudio,
trabajo o placer. Por eso, tener un bolso listo para partir, se hizo costumbre. No quiero decir
que esto sea un hecho extraordinario. Es más, mucha gente comparte estehábito. Vivir o
trabajar entre dos o más ciudades. Dividir la vida entre distintos territorios, como quienes
viajan entre hemisferio y hemisferio, viviendo de alguna manera en un eterno verano o
invierno. O mucho más común (en nuestra realidad latinoamericana), los “migrantes” o
“trabajadores golondrinas”. Personas que se desplazan, por periodos, en busca de trabajo y
que vuelven a su origen cuandoterminan las temporadas de productividad. Esto es muy
común en el caso de la cosecha de las cañas de azúcar en el litoral argentino o las temporadas
de veraneo, donde las ciudades turísticas se convierten en atractivos laborales para mucha
gente.
Estos movimientos me inquietan. ¿Siempre fuimos sedentarios? Por supuesto que no. La
historia nos muestra que en términos temporales, nuestrosedentarismo es relativamente
nuevo (sólo diez mil años, frente al millón ochocientos mil años, durante los cuales, los
humanos deambulamos por esta tierra). Indagando sobre las culturas nómadas, descubro la
intrínseca relación que éstas mantienen con el territorio en donde se mueven, orientadas por
las necesidades que buscan satisfacer; ya sea comida, agua o incluso el mismo sol. Siguen el
ritmode la naturaleza, lo acompañan y captan sus recursos de una manera prudente.
Por el contrario, el sedentarismo se inicia con el desarrollo de la agricultura y la ganadería.
Ambas tecnologías demandan una constante provisión de recursos, para garantizar su
eficiencia. En el caso de la agricultura; el agua, el suelo fértil y el sol. Es así, como se inicia una
relación hombre-naturaleza bastanteparticular. Ahora, el hombre, debe garantizar estos
recursos para poder alimentarse, en algunos casos entendiendo de manera más sana la
relación con su medio. Por ejemplo, la agricultura en terrazas de los chinos o Incas, la
fluctuación del Nilo en Egipto. La cultura, en este caso vista desde sus sistemas de producción;
y el territorio, están fuertemente ligados, en función a los tiempos y lasposibilidades que cada
uno ofrece.
Sin embargo, el hombre, cada vez más, ve a la naturaleza como fuente de recursos y menos
como medio y soporte. La naturaleza se ha transformado en una fuerza a controlar, para poder
obtener de ella lo que se necesita.
En este punto, es interesante distinguir dos conceptos más, muy relacionados con el
nomadismo, pero con diferencias fundamentales. Lamigración y la trashumancia. La migración
implica el desplazamiento de un grupo humano, pero busca lograr una nueva residencia,
mientras que en el nomadismo, no hay una residencia fija. En el caso de la trashumancia existe
un movimiento continuo pero se diferencia por tener puntos estacionales fijos que van
cambiando sus actividades dependiendo de la época del año. Esta práctica está muy
relacionadacon el pastoreo, los ciclos de producción y descanso de la tierra, el clima y en
especial, las estaciones.

Ahora bien. En épocas de crecimiento y expansión de las ciudades, vale preguntarse: ¿Se
pueden aplicar estos conceptos a las urbes? Si su antítesis, el sedentarismo, es la condición sin
la cual no habría urbanidad.
Paradójicamente, el nomadismo, las migraciones y la trashumanciaafectan a las ciudades y sus
territorios, de manera constante, muchas veces por ignorancia y en ocasiones de manera
agresiva.
Migración
4. f. Desplazamiento geográfico de individuos o grupos, generalmente por causas económicas o
sociales.
Todo migrante se desplaza en busca de mejorar su calidad de vida, mejores ingresos, mayor
acceso a educación y salud y más oportunidades para sus hijos....