civil
CAPITULO 13. LAS CAUSAS DE JUSTIFICACION EN PARTICULAR. Por Marco Antonio Terragni.
Sumario: 1: La legítima defensa. Fundamento. Requisitos. Bienes defendibles. La legítima defensa de terceros. Las denominadas legítimas defensas privilegiadas. 2. El estado de necesidad. Fundamento, naturaleza, clases y requisitos. El conflicto de bienes iguales. Estado de necesidad justificante ydisculpante. 3. Colisión de deberes. 4: El ejercicio de un derecho, autoridad o cargo. Análisis. 5. El exceso en las causas de justificación. 5. Consideración de la obediencia debida en la teoría del delito.
Legítima defensa. Fundamentos. Requisitos. Bienes defendibles. Las denominadas legítimas defensas privilegiadas.
Desde siempre (tan antigua es esta institución que sus antecedentes sepierden en la noche de los tiempos) se ha declarado impune a quien ejecuta un acto –que de no concurrir ella constituiría delito- defendiéndose. Por supuesto que han cambiado los requisitos para que ello dependiendo, en algunos casos, de las costumbres de los distintos pueblos en las diversas épocas históricas y, modernamente, de lo que establece cada legislación. En éstas, por lo general, ha pasadode la Parte Especial de los respectivos códigos –en la que aludía a ciertos delitos, como el homicidio o las lesiones- a integrar luego los institutos de la Parte General.
En cuanto al principio y cimiento en que se apoya la impunidad, existen varias teorías al respecto, como aquella (a) que sostiene que nadie está obligado a soportar una injusticia y pone en la balanza los intereses de quien sedefiende, haciéndolos prevalecer (como no podría ser de otra manera, porque el primero afirma el derecho y el otro lo niega) sobre la aspiración espuria del agresor. El asunto se enfoca, así y en un sentido más amplio, desde la perspectiva colectiva de
Resguardo del orden jurídico.
Otra opinión (b) gira en torno de esta evidencia: es una posibilidad que se le brinda al ciudadano cuando elEstado no puede acudir, pronta y eficazmente, para resguardar sus derechos, que son puestos en peligro. Reemplaza al Estado en funciones que el Estado no puede desempeñar. Sin embargo, si bien es cierto que a nadie se le puede exigir heroísmo, resulta peligroso que se piense que -en medio de la inseguridad en que viven muchas sociedades- el ámbito de la legítima defensa está ampliado a favor de losparticulares; no es así, porque el marco de la ley es estricto e inadmisible que la justicia se consiga por propia mano.
Las dos posturas principales, que hemos apuntado, difieren en algo esencial: El fundamento (a) es de carácter objetivo y avala la idea de que la legítima defensa es una causa de justificación; en tanto que el fundamento (b) es subjetivo y su aceptación conduciría a estimarlacomo una causa de inculpabilidad.
En la actualidad prevalece en la doctrina el entendimiento de que la legítima defensa es un derecho de necesidad: una necesidad a la que se le asigna una posición de privilegio. El acto típico, llevado a cabo en las condiciones que marca la ley, es ilícito. No por nada, a la defensa –así ejercitada- se la califica como legítima.
El Código Penal argentino adoptaeste criterio y, porque declara que el hecho es lícito, no castiga a quien obrare en defensa propia o de sus derechos, siempre que concurran las circunstancias que indica el propio art. 34.6. Esta última cuestión, que se reúnan los requisitos, está demostrando que la interpretación debe ser restrictiva. La posibilidad de acudir a las vías de hecho sólo se concede en la medida en que no haya otromedio jurídico apto para la protección de los bienes jurídicos puestos en peligro por la agresión.
Bienes defendibles.
En algunos ordenamientos antiguos, por ejemplo en el Derecho romano tardío, solamente se amparaban la vida y la integridad física. En tanto que el Código Penal argentino autoriza a defender esos y así como los demás derechos, en cuanto declara impune a “El que obrare en...
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