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UN ELEMENTO PARÓDICO
EN LA PRIMERA SALIDA DE DON QUIJOTE
Luis Mariano Abad Merino

Es ya casi una tradición, en el ámbito de los estudios cervantinos, orientar el
análisis de la p r i m e r a salida de don Quijote hacia el debatido problema de si
existió o no u n a breve «novela ejemplar» en el propósito inicial de Cervantes.
En este asunto, discutido a veces con apasionamiento, no es tanto latesis de
u n a primitiva novela corta lo que suscita la polémica cuanto las consecuencias que de ello pretenden obtenerse. En efecto, suele interpretarse esta posibilidad como u n a r g u m e n t o , casi definitivo, para d e m o s t r a r las improvisaciones, la inconsciencia y la imprevisión de Cervantes al concebir su novela; p a r a
demostrar, en suma, la inferioridad del autor con respecto a sucreación. Es
fácil c o m p r e n d e r que, si la valoración de Cervantes c o m o n a r r a d o r se hace
depender del primitivo plan del Quijote, sea ésta u n a cuestión especialmente
controvertida.
Parece preferible, sin embargo, deshacer el vínculo que tan estrechamente se h a establecido entre estos dos asuntos y adoptar, ante los primeros capítulos del Quijote, u n a perspectiva m á s i n ma n e n t e que no se p r o p o n g a emitir
juicios sobre las supuestas intenciones o la idiosincrasia del autor. «El lector
no puede ni debe tener en cuenta intenciones quizá existentes, pero que no
han quedado objetivadas en el poema», decía Amado Alonso, y, sin duda, es
aquí aplicable ese principio. Más que p r o b a r cuál fue el proyecto originario
del Quijote, para determinar, acto seguido,si Cervantes fue o no consciente de
la trascendencia de su creación, puede resultar interesante considerar, tal y
c o m o hace la estilística, que toda obra literaria es u n a construcción funcionante; que, parafraseando a Amado Alonso, toda obra literaria no sólo es u n a
criatura con propio crecimiento en tanto que en ella se van sucediendo las
acciones imaginadas, sino que la m i s m a índolede la fantasía tiene dentro de
la obra su propia historia. Desde este p u n t o de vista n o resultará, pues, perti1

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1. Amado Alonso, «La interpretación estilística de los textos», en Materia y forma en poesía, Madrid,
Gredos, 1977, p. 94.
2. Ibídem, p. 105.

ACTAS II - ASOCIACIÓN CERVANTISTAS. Luis Mariano ABAD MERINO. Un elemento paródi...

nente el problema de discernir cuál era elprimitivo plan del Quijote, sino que
h a b r á que centrar la cuestión en m o s t r a r de qué m a n e r a la idea primera de
Cervantes, la primera intuición, si así queremos llamarla, se h a ido estructurando, ha ido adquiriendo sus notas constitutivas y su forma a medida que
avanza la obra. E n este sentido, mejor que determinar si Cervantes escribía o
no al correr de la pluma, sin plan definitivo,convendría analizar qué elementos otorgan a la primera salida de don Quijote u n a especial coherencia interna; hasta qué punto quedan establecidos en ella los ejes estructurales de la
novela, y cuál es su desarrollo a medida que avanza la obra.
Partimos de la base de que, tal como podemos leer en el Prólogo, es el
Quijote u n a obra concebida con la intención, expresamente declarada, de acab a r conlos libros de caballerías. Cervantes se sirve de la locura de u n hidalgo
para corregir, mediante el h u m o r , la inverosimilitud de las novelas caballerescas, para poner en evidencia y ridiculizar la falta de verdad histórica y poética
de los «disparates imposibles» que en estos «vanos libros» están esparcidos.
La parodia de las convenciones de las novelas de caballerías es u n o de losfundamentos de lo cómico en el Quijote y, obviamente, constituye u n a constante que se extiende a lo largo de toda la obra. Sin duda, c o m o se ha repetido innumerables veces, es el Quijote m u c h o m á s que «una invectiva contra los
libros de caballerías», pero n o por ello debe menospreciarse la importancia
que la forma paródica posee en la novela: se trata, posiblemente, del elemento
esencial...