clasica
La voz femenina
El exilio de la poesía terminó con la llegada a al-Andalus de unos nuevos invasores norteafricanos: los almohades. Aunque bereberes y reformistas religiosos como los almorávides, no rechazan las formas culturales árabes con posibles rasgos de laicidad como la poesía. Los máshiperbólicos madī neoclásicos acompañan a estos nuevos califas y en las provincias de al-Andalus vuelven a surgir cortes literarias. Un caso muy significativo es Granada, silenciosa poéticamente durante la época taifal y almorávide, que ve aparecer en el siglo XII excelentes poetas alrededor de su gobernador almohade como al-Kutandī, al-Ruafī, etc., y lo más sorprendente: mujeres poetas.
Durante los siglos anterioreshabían aparecido algunos nombres femeninos en la nómina de los poetas de al-Andalus como la mencionada Hassāna al-Tamīmiya, la princesa Wallāda, amante de Ibn Zaydūn, la hija del rey al-Mu‘taim de Almería, etc.105, pero difícilmente podrían considerarse realmente poetas, en primer lugar por lo exiguo de las composiciones que con su nombre nos ha llegado, y, en segundo, porque estas escasas muestrasno ofrecen unas características destacables fuera de la rareza de haber sido escritas por mujeres en una sociedad medieval y musulmana.
Pero en el siglo XII la situación cambia: el número de las poetisas aumenta y, entre ellas, una ofrece una extensa y excelente producción —110→ poética: afa Bint al-aŷŷ ar-Rakūniyya de Granada (1135-1191). Al ser de origen bereber, nos inclinamos a pensarque la explicación del desarrollo de la poesía escrita por mujeres y la aparición de la Rakūniyya, en particular, pudiera ser debido a la tradición cultural de esta etnia norteafricana en la que el estatuto femenino parece gozar de una mayor autonomía, posiblemente por una antiquísima tradición matriarcal. Así entre algunas tribus beduinas bereberes las jóvenes podían participar en las tertuliaspoéticas de la tribu, hecho vedado en las tribus árabes.
El caso es que esta granadina de origen bereber goza de una muy amplia libertad de movimientos en la sociedad de su tiempo hasta el punto de que la mayor parte de sus poesías están dedicadas a su amante Abū Ŷa‘far ibn Sa‘īd y a la descripción de las citas que tuvo con él. A pesar de estos amores, habidos fuera del matrimonio, y de que su amantefue un manifiesto rebelde andalusí contra el poder almohade, afa fue nombrada preceptora de las hijas del califa en Marraquesh.
La poesía de la rakūniyya puede compararse en calidad a la de los poetas masculinos de su época y sólo sabemos que es una mujer porque utiliza los tópicos de la descripción de la belleza femenina para sí misma, lo que produce un efecto sorprendente. Así, escribe a suamante Abū Ŷa‘far el siguiente billete:
Un visitante llega a tu casa:
su cuello es de gacela,
luna creciente sobre la noche;
su mirada tiene el embrujo de Babilonia
y la saliva de su boca es mejor
que la de las hijas de la parra;
sus mejillas afrentan a las rosas
y sus dientes confunden a las perlas,
¿puede pasar, con tu permiso,o ha de irse, por alguna circunstancia?106
Abū Ŷa‘far ibn Sa‘īd, que también era poeta,107 pertenecía a una familia de aristócratas e intelectuales cuyo feudo era Alcalá la Real y, como muchos de los nobles e intelectuales andalusíes, se opuso a la —111→ dominación almohade, pero fue capturado y ejecutado. Al saber la muerte que le esperaba, Abū Ŷa‘far le dijo a su primo que levisitaba en la prisión las siguientes palabras que reflejan el mundo brillante y hedonista de estos poetas andalusíes:
¿Se derraman por mí esas lágrimas, que he gozado de todos los placeres de este mundo, que me he alimentado con las pechugas de las aves, que he bebido de las copas de cristal, que he montado en los mejores corceles, que he reposado en los más mullidos lechos, que me he...
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