Clausurado Por Ausencia Editado 18 07 2014







Clausurado por Ausencia
De Juan Radrigán
























Clausurado por ausencia

Tres personas- dos mujeres y un hombre-, que han trabajado durante años en la construcción de una gran obra que simbolizará la cordura, el amor y la reconciliación, esperan inútilmente que esta sea inaugurada por las autoridades pertinentes. En la estéril espera comienzan a dar claras muestrasde locura, desamor y antagonismo.




Se escucha la canción nacional.
Tres personajes –Eva, Handeli y José- en quietud absoluta; tras cada uno de ellos cuelga un letrero de acrílico: Eva, “Bazar”, Handeli, “Café”, José, “Muebles”. Terreno muy bien cuidado, un banco de plaza. Eva sostiene una vela encendida en cada mano, Handeli, una bandeja con vasos de vino y caramelos, José, remolinos. Vistencomo si hubiesen tenido que escoger al azar en montones de ropa usada, los tres calzan gruesos bototos.
Al fondo del escenario un lienzo escrito a mano alzada con la leyenda Arbeit Macht frei.
Los últimos acordes de la canción nacional se derrumban.


Handeli: Kraus…

José: José

Handeli: La embarramos, Kraus, se nos olvidó sacar el letrero grande.

José: No importa. Ya noimporta.

Eva: ¿Cómo que no importa? La Handeli dice que eso era lo que ponían los alemanes en los campos de concentración. Y esto es otra cosa. Onda que es todo lo contrario.
José: ¿Estás segura?

Eva: Segurísima, antes de llegar aquí vi muchas películas que se trataban de campos de concentración y ninguna era como esto, ¿no cierto, Handeli?
Handeli : No me acuerdo, yo nuncafui al cine contigo.

Eva: Huevona.

Handeli: Callampera.

Eva: Arribista.

Handeli: Indigente.

Eva: Pajera.

José: Concéntrense, concéntrense, no se dejen arrastrar por la enajenación; si están hablando de letreros, hablen de letreros, si están hablando de camellos, hablen de camellos. Esa es la única forma que tenemos de defendernos de esaalimaña que nos está royendo el cerebro.

Handeli: ¿Insinúas que nos estamos volviendo locas? ¡La vieja maraca que te tiró de las patas será loca, no yo, yo estudié en los mejores colegios de…

José: Sí, sí, de Berlín, de Munich y de Leipzig.

Handeli: Por nombrar algunos.

José: Claro, por nombrar algunos.

Eva: Yo soy actriz y tengo una cultura de la putamadre. Medebo saber más de cien parlamentos de memoria. Cáchate este: “Las únicas personas que amo son las que están locas: locas por vivir, locas por hablar, locas por ser salvadas” (Pausa) ¿Cómo te quedó el ojo?.

José: Lleno de lágrimas, es una frase preciosa…Locos por ser salvados…¿Salvados de qué?.

Eva : Ah, no sé po, yo decía eso no más en toda la obra.

Handeli: Bueno, bueno, volvamos a lodel letrero. Yo me acuerdo que cuando el Diego lo estaba colgando dijo que no era una broma, que él estaba seguro de que ese letrero (señala) iba a quedar puesto ahí para siempre, como una maldición histórica…Para vergüenza y ludibrio de este país.

Eva: Eso fue hace mucho tiempo, estamos hablando de ahora. Céntrate.

Handeli: Es que para llegar a hoy tengo que caminar por muchos ayeres (AEva) Perdóname esa frasecita. Yo llegué aquí al Kartoffelschalenkommando, o sea, al comando de pelar papas, luego subí a Arbeitsdienst, y después que no quise soltarle el mono al Meister bajé a Scheissbegleiter; no sé cuanto tiempo estuve limpiando mierda, pero de repente cambiaron al Meister, porque de cien sacos de cemento que llegaban al mes, se llevaba cincuenta para la casa, entonces memandaron a trabajar a la Krankenbau, o sea a la enfermería. (Pausa) Pucha que pasaban cosas raras ahí… Me acuerdo del flaco Freire.

Eva: ¿El Cyrano? (gesto de nariz larga)

Handeli: Claro, ese (José se tiende en el banco) Era un buen trabajador. Democratacristiano no más, pero eso le puede pasar a cualquiera. (A José) ¿Y tú, de qué estás enfermo?
José: De todo, de nada, no...