Clinica
Introducci—n
comœn a otras profesiones o especialidades
de la psicolog’a profesional.
E
Somos conscientes de la complejidad de
nuestro prop—sito. Por un lado, nos enfrentamos a una tarea novedosa, sin muchos
referentes nacionales o internacionales.
Pero, por otra parte, tenemos entre manos
una profesi—n que se desarrolla vertiginosamente, que alcanza, de formacreciente, m‡s
competencias y espacios de trabajo dentro
del campo de la Salud, que adquiere un
reconocimiento pœblico e interprofesional
cada vez m‡s importante, sin que se adivinen los l’mites exactos de un campo profesional en perpetuo movimiento y desarrollo.
l Colegio Oficial de Psic—logos en su
calidad de organizaci—n, de ‡mbito
estatal, que agrupa institucionalmente a todos los psic—logosespa–oles, tiene
entre sus cometidos, definidos por ley, la
obligaci—n de ordenar el ejercicio profesional. Con el fin de cumplir con este mandato legal, el Colegio se ha propuesto delimitar y definir los distintos perfiles de las
diversas especializaciones psicol—gicas profesionales.
Esta empresa no se sustenta, sin embargo,
œnicamente en el imperativo legal. La Junta
de Gobierno ha cre’donecesario que nuestra organizaci—n tenga un papel m‡s activo
en todas aquellas ‡reas que son determinantes para el desarrollo profesional. En
este sentido, se ha considerado que el
Colegio debe formular con claridad cu‡l es
su posici—n en aspectos que hacen referencia al ‡mbito de competencias de las
distintas psicolog’as profesionales, a las
habilidades y conocimientos necesarios
para cadaespecialidad y a los contenidos y
las formas de acceso a la formaci—n tanto
b‡sica como especializada de los psic—logos.
Este panorama de continuo crecimiento de
la psicolog’a cl’nica y de la salud ha tenido
como determinante el cambio que en las
œltimas dŽcadas ha experimentado el concepto de salud. La vieja dicotom’a de salud
f’sica - salud mental se ha superado con el
reconocimiento del componentebio-psicosocial del enfermar, disolviŽndose sus l’mites al conocerse, cada vez con mayor exactitud, la interdependencia entre la conducta
o la ÒpsiqueÓ y el cuerpo. Una consecuencia
inmediata de este cambio ha sido la necesidad creciente de los equipos interdisciplinares en todos los campos sanitarios, incluso
en aquellos m‡s alejados de los tradicionales como la Òsalud mentalÓ. Otra importanteconsecuencia ha sido la creciente importancia de la intervenci—n psicol—gica en la prevenci—n de los trastornos en cuya gŽnesis la
conducta es un eje etiol—gico fundamental.
As’, algunos de los padecimientos m‡s
importantes de nuestro tiempo como el c‡ncer, los que se derivan de los accidentes de
circulaci—n, los trastornos cardio-vasculares
El presente documento se enmarca dentro
de esta l’nea detrabajo y pretende dar cuenta del perfil profesional del psic—logo cl’nico y de la salud. En sus p‡ginas, intenta
recoger todos aquellos aspectos b‡sicos y
fundamentales que conforman y distinguen
el quehacer psicol—gico en el ‡mbito de la
Salud, subrayando lo propio y matizando lo
Perfiles Profesionales del Psic—logo
Psicolog’a Cl’ica y de la Salud
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Colegio Oficial de Psic—logos
La evoluci—nacelerada en todos los frentes
en los que hay trabajando psic—logos cl’nicos y de la salud puede hacer que parezca
temerario intentar apresar en unas pocas
p‡ginas toda la riqueza y posibilidades del
trabajo y de desarrollo profesional.
Posiblemente podr’amos estar de acuerdo
con esta opini—n si el prop—sito del Colegio
fuera establecer una declaraci—n definitiva
de lo que entendemos como psicolog’acl’nica y de la salud. Sin embargo, nuestra
intenci—n es levantar acta de aquello que
hacemos sin coartar lo que podamos hacer,
siendo conscientes de que observamos el
fotograma de una pel’cula que se encuentra
en plena proyecci—n.
y el SIDA, tienen en la prevenci—n psicol—gica una importante y œtil herramienta para
la reducci—n de su incidencia. No es exagerado afirmar, adem‡s, que en muchos...
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