Colombia en crisis



Colombia en crisis

Colombia atraviesa la crisis más compleja de su historia; nunca se había vivido una situación tan confusa. En el periodismo de televisión, triste­mente, no hay una congregación de voluntades para ayudar a salvar al país. No hay entendimien­to, hay buenas intenciones pero difusas. Parece que hubiera unos pocos interesados en conseguir rating así afecten negativamente lasociedad co­lombiana.
La justicia está en crisis, hay impunidad, la vio­lencia política, la intolerancia, el sícariato pagado por variadas fuerzas ocultas, el individualismo y la delincuencia común, desangran a Colombia. La violencia se predica desde los entes sociali-zadores más importantes: la familia, la escuela y la televisión. Una cultura de destrucción, odio y guerra, invade a Colombia.Si el periodismo de la televisión no se une de­cididamente con el de los demás medios de co­municación para practicar la cultura de la convi­vencia, nos vamos ha hundir en la sangre y en la destrucción.
Así como en la televisión hay periodistas ama­rillos, también hay algunas personas irresponsa­bles entre el grupo de quienes hablan con artis­tas, comentan discos o hacen notas de farándula ypor tener ojos bonitos, escotes atrevidos o ar­moniosas curvas y un micrófono disponible en algunos programas de TV, hacen lo que quieren con chabacanería, dicen barbaridades o cometen despropósitos, e ilegítimamente se autoprocla-man periodistas causándole también daño a la imagen de nuestra profesión.
"Pagamos justos por pecadores"
Darío Arizmendi escribió en la revista Gaceta del CPB: "Como enlas demás profesiones, en el periodismo hay de todo. Unos de nosotros nos excusamos de haber cometido tales o cuales fal­tas, y reconoceremos tales y cuales otras. Pero en alguna forma, hemos contribuido a deformar y a degenerar la auténtica imagen de la compleja ta­rea profesional del periodista. Y lo grave es que pagamos justos por pecadores". (...)
Más violencia que en el barrio
Una de lasrespuestas más contundentes sobre el poder y la penetración de la televisión, y así mismo sobre sus riesgos, la dio una investigación
contratada por el Instituto Colombiano de Bien­estar Familiar con el Centro Nacional de Consul-toría, en septiembre de 1997, en todo el país.
A la pregunta: Comparando la violencia que se da en su barrio con la que ve en la televisión, usted diría que ve:
Mayorviolencia en la TV 83% Menor violencia en la TV 8% Es igual 9%
¿A quién le gusta dormirse después de ver úni­camente lo peor del país magnificado en forma sensacional, en un noticiero y con la impresión de que todo está perdido, que ya no tenemos es­peranza, que le mejor es irnos del país?


Los colombianos ven en la TV noticias mal trata­das, con lujo de detalles sobre masacres, homici­dios,descuartizamientos, linchamientos, explo­siones, guerra, odio, violencia familiar y política, degradación moral y todos los peores modelos. Cámaras para los delincuentes
A Colombia y a los colombianos no se les hace justicia, pues esa exposición permanente de la gente, o las cosas negativas y el ocultamiento de las positivas, dejan la sensación de que hubie­ra más personas del mal que del bien; quefue­ran más los homicidas, Jos secuestradores y los hampones, que los ciudadanos honestos. Es que aquellos y sus hechos tienen más micrófonos y cámaras a su servicio que la gente honesta que re­chaza la violencia y trabaja por la paz o la ansia.
En reclusión o en la clandestinidad, delincuen­tes de todo tipo tienen cámara para dar declara­ciones a la televisión y hasta justificarse.
Se exponecomo argumente justificado la libertad para informarlo todo —así se viole el código de ética—, que Colombia es violenta y eso es lo que hay que mostrar, porque eso es lo que vende. Pero son argumentos fácilmente rebatibles. La verdad —y en eso están de acuerdo muchos per­sonajes de la misma televisión— es que "desde
hace tiempo algunos noticieros, libretistas y directores, se desborda­ron sin...