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El mayor pecado político de Felipe Calderón fue ganar la contienda presidencial de julio de 2006. Por eso —y a manera de venganza política—, los agraviados y derrotados en las urnas inventaron unaferoz campaña de odio en su contra, a partir del falso y maniqueo señalamiento de que Calderón fue responsable de los miles de muertos que arrojó la pelea entre las bandas criminales.
El mayor pecadopolítico de Enrique Peña fue ganar la contienda presidencial de julio de 2012 y, además, ser capaz de convertir en importantes reformas para el país el llamado Pacto por México.Sin embargo, y a pesar del éxito que significó el espíritu reformista, hoy Peña Nieto es víctima de una feroz campaña de odio y linchamiento, estimulado por grupos políticos interesados, por mediosvengativos, empresarios resentidos y sectores que apuestan por la desestabilización, a partir de la mentirosa y maniquea especie de que Peña Nieto es responsable de la muerte y desaparición de losnormalistas.














Uno de los mayores pecados políticos de Andrés Manuel López Obrador fue aparecer en fotografías de campaña electoral junto a José Luis Abarca, el ex alcalde deIguala, autor intelectual del crimen y desaparición de los normalistas. Y a partir de esas imágenes, grupos interesados pretendieron vincular a AMLO —de manera directa—, no solo con el alcalde deIguala y presunto criminal, sino con quién sabe qué perversidades propias del canibalismo político. En éste caso la campaña de odio no alcanzó los niveles de otros ejemplos. Y hasta hoy, seguramente elmayor pecado político del PRD y de su grupo hegemónico, "Los Chuchos", fue postular a José Luis Abarca como alcalde de Iguala y a Ángel Aguirre, como gobernador de Guerrero.











Sinembargo, y a pesar de que Abarca también fue postulado por el PT, por el Movimiento Ciudadano y por Morena, y de que Aguirre fue postulado por todos los partidos de las izquierdas y por el PAN,...