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Un día en la multifacética vida de Laura Machado

Laura Machado, que además de ser mi hermana es médico de la UNAB, se levantó a las seis y diez a pesar de que su escandalosa alarma que es cómo un tractor dando reversa en un parqueadero cerrado, que sonó desde las cinco y cuarenta am con intervalos de cinco minutos; le echó comida a su pez Toribio Miguel que es un beta azul, y a sus dos perrosSimón que es un Westy blanco, y Lola que no tiene una raza definida, proviene de la calle podría ser una mezcla entre oveja y pincher con mucho pelo; cuando terminaron de comer sus perros los llevó a la terraza un rato para que hicieran sus necesidad básicas.

Simón y Lola, perros de Laura Machado

Bajó las escaleras entre dormida y se metió a la ducha, cantó una canción de Marroon Five unpoco desafinada, después de terminar su show en la ducha salió por que se dio cuenta que era tarde, escogió rápido su ropa y espero el grito de su padre para irse con el a la clínica, ya que él también trabaja allá.
Al llegar se quedó en la puerta de la clínica, entró y desayunó en la cafetería unas galletas de un aspecto poco agradable y una botella de agua fría, comió muy rápido por no decir quese atragantó, subió al tercer piso donde trabaja revisó que pacientes nuevos había, y no había nadie nuevo, solo sus nueve pacientes antiguos, vio sus exámenes que acababan de llegar para ver como iban, al estar revisando las hojas con muchas cosas poco entendibles, llegó el Dr. Néstor Díaz, Médico Internista cómo a las ocho de la mañana, se sentaron a hablar un poco sobre los pacientes y suscambios, hicieron una ronda para revisar a cada uno de ellos más de cerca, y entre esa ronda Laura con un gesto de tristeza en su rostro y la voz cortada le contó al Dr. Díaz de su paciente María Juliana, una mujer campesina de 78 años de edad quien esta hospitalizada por un problema respiratorio crónico, y que a parte de esto sufrió la noche anterior una trombosis cerebral; le decía en un tono conuna carga grande de preocupación que por esto la paciente había perdido el habla, no estaba caminando, y no comía.
Después de las palabras de Laura, fueron a valorar a María Juliana, y descubrieron que no respondía a ningún llamado y que respiraba con mucha dificultad a pesar del oxigeno; Decidieron llamar a la sala a una de sus hijas y de manera muy cuidadosa y profesional le explicaron el altoriesgo de muerte que tiene su madre, y las pocas probabilidades de tratamiento que le pueden brindar, la hija con mucha tristeza aceptó la situación y se quedo acompañando a su madre en el que podría ser su último día.
Cuando el Dr. Néstor se fue, Ella se quedó evolucionando a sus pacientes y escribiendo en su historia clínica; Entre las once y media y las doce, subió al cuarto piso donde hayunos salones fríos y con un aspecto sobrio, y se reunió con algunos Internistas y Residentes de Medicina Interna para hablar con ellos sobre cómo manejar el dolor de cabeza en la clínica; la densa reunión finalizó tipo una de la tarde.
Antes de irse a su casa, bajó nuevamente a su piso a revisar a sus pacientes, preguntó si hubo algún cambio en especial y habló con la Medico Hospitalario quientenia el turno de la tarde, le comentó sobre la paciente María Juliana para que se quedara pendiente de ella.
Con mucha hambre o por lo menos los rugidos de su estomago lo mostraban así, y con un dolor de cabeza que le provocaba casi arrancársela de ella, cogió un taxi que la trajo de vuelta a casa; Mari quien es la encargada de satisfacer su hambre con sus deliciosos platos, le sirvió de almuerzomacarrones con queso, carne asada, papitas a la francesa y jugo de maracuyá, por fin Laura mostraba una cara sin estrés y cargos laborales; al pararse para lavar sus manos Simón su perro aprovechó el descuido y atacó ese plato de macarrones como si jamás volviera a comer algo en su canina vida; cuando ella se volteó y vio que sus macarrones habían desparecido en cuestión de segundos, su perro la...