Comentario De Texto
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Estamos ante un texto de tipo histórico jurídico, debido a que se trata de una orden emitida por el poder real, en este caso el rey Carlos I, y por consiguiente implica el cumplimiento y obligación por parte de este sector de la población, que formabaparte de la isla de Tenerife en el siglo XVI.
El autor del texto es el rey Carlos I de España (1500-1558), siendo el primero en unir las coronas de Castilla, Aragón, Navarra, además de ser el emperador del Sacro Imperio romano germánico como Carlos V. Hijo de Juana I de Castilla y Felipe el Hermoso, nieto por vía paterna de Maximiliano I de Austria (Habsburgo) y María de Borgoña, de quienesheredó los Países Bajos, los territorios austriacos y el derecho al trono imperial, y por vía materna de los Reyes Católicos, de quienes heredó Castilla, Navarra, las Islas Canarias, las Indias, Nápoles, Sicilia y Aragón.
Este texto fue realizado el día 25 de octubre del año 1541, en Madrid.
En este momento la sociedad de las islas durante el Antiguo Régimen era compleja y estabamuy dividida, conformándose cada grupo social en función del grado de apropiación de las tierras de cultivo y de su participación en los circuitos comerciales canarios. De forma genérica podemos decir que la nobleza y el clero, eran grandes terratenientes, propietarios de la mayor parte de la tierra y del agua. Tendrán una posición social privilegiada y desempeñarán importantes cargos políticos enlos cabildos o ayuntamientos de la época, como en las milicias, la inquisición, etc. Los grandes comerciantes, en su mayoría de origen extranjero, que llegan a Canarias para comerciar con la caña de azúcar o el vino, además de otros negocios como la trata de esclavos, importación de manufacturas, tabaco, café, etc. Acumulan grandes riquezas, y muchos de ellos accederán al status nobiliario debidoal matrimonio con miembros de la aristocracia o por la compra de títulos. Los labradores, medianos y pequeños propietarios de tierra y de agua, que obtienen de sus propiedades lo necesario para vivir aunque no lo suficiente para enriquecerse. Incluso a veces deberán trabajar para otros propietarios cuando sus propias cosechas no sean buenas. Los pequeños comerciantes y los artesanos son un grupopoco numeroso, vivirán en las ciudades y tendrán un nivel de vida semejante al de los labradores. Los campesinos sin tierras trabajaban para los grandes propietarios como arrendatarios, aparceros o jornaleros. Suelen vivir malamente y constituirán la mayor parte de la emigración cuando lleguen los malos tiempos. Por último, nos encontramos con los mendigos y esclavos que componen el espectro másbajo de la sociedad, formando un grupo verdaderamente marginado.
Canarias durante esta época formaba parte del reino de Castilla, estando gobernada por un virrey, representante de la autoridad real. Su sede se localizaba en Tenerife. Al mismo tiempo, cada isla componía un único municipio administrado por un Cabildo. Finalmente, el poder judicial estará desarrollado por la Audiencia, cuya sedese localizaba en Gran Canaria.
En síntesis podríamos citar el título del texto: Real cédula autorizando, a petición de los vecinos, la permanencia de los moriscos en Tenerife, dado que recoge perfectamente y de forma breve el contenido del texto, el cual tras distintos procesos finaliza con la autorización de permanencia de los moriscos en Tenerife. Se trata de una real cédula por locual se concede de forma favorable la petición de los vecinos de Tenerife.
El texto comienza con una enumeración de algunos de los títulos del rey Carlos I, queriendo demostrar su autoridad y validez, ante la persona que va dirigida la carta, el órgano de justicia de Tenerife. Por el contenido de la carta podemos apreciar que los moriscos componen un grupo social marginado y depreciado...
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