Como escuchar a dios
OMO
R5CUCHAR
DE DIOS
Charles Stanley
LAVOZ
j1
GRUPO NELSON
Una división de Thomas Nelson Publishers
Desde 1798
NASHVILLE
DALLAS
MÉXICO DF.
Río DE JANEIRO
BEI]ING
CONTENIDO
I 11
¿Habla Dios todav(a?
5
Propósito de Dios al comunicarse Cómo reconocer la voz de Dios Factores que determinan la forma en que Dios se comunica 59 ¿Escuchamos a Dios? 71Sentados en la presencia del Señor Impedimentos para escuchar Escuchar y obedecer 119 Una vida que escucha... una vida equilibrada 131 109 45
17 27
EX LIBRIS ELTROPICAL 7 JUL 08
© 1994 EDITORIAL CARIBE
P.O. Box 141000
III
Cómo logra Dios atraer nuestra atención
IV
V
NashvilIe, TN 37214-1000
Título en inglés: Haw to Listen to Cad
©1985 by Charles
5tanley
VI
VIIVIII
Publicado por Thomas Nelson, Inc. ISBN: 0-88113-131-8
ISBN 978-0-88 I 13- I31-4
83
Nuestra actitud mental ante lo espiritual
99
Traducido por David R. Powell Reservados todos los derechos. Prohibida la reproducción total o parcial de esta obra sin la debida autorización de los editores.
E-mail: caribe@editorialcaribe.com
IX X XI
Impreso en EE.UU. Printed in U.5.A. 22 aImpresión, 11 /2007 www.caribebetania.com
CAPÍTULO 1
¿Habla Dios todavía?
El Salmo 81 es un triste relato acerca de un pueblo que se negaba a escuchar a Dios. El misericordioso corazón del Padre, con sus numerosos intentos de lograr la atención y la devoción de Israel, y el persistente rechazo por parte de ellos, se ponen de manifiesto en los versículos 8 al 14: Oye, pueblo mío, y teamonestaré. Israel, si me oyeres, No habrá en ti dios ajeno, Ni te inclinarás a dios extraño. Yo soy Jehová tu Dios, Que te hice subir de la tierra de Egipto; Abre tu boca, y yo la llenaré. Pero mi pueblo no oyó mi voz, E Israel no me quiso a mí. Los dejé, por tanto, a la dureza de su corazón; Caminaron en sus propios consejos. ¡Oh, si me hubiera oído mi pueblo, Si en mis caminos hubiera andado Israel!En un momento habría yo derribado a sus enemigos, y vuelto mi mano contra sus adversarios. 5
6
Cómo escuchar la voz de Dios
¿Habla Dios todavía?
7
Casi podernos escuchar el latido del corazón de Dios cuando implora ante la nación de Israel, diciendo: «Les ruego que me escuchen. Les ruego que oigan mi voz». Cada uno de nosotros, también, debería preguntar: «Señor, ¿me has estadotratando de decir algo que necesito desesperadamente? ¿Me estás exhortando a escuchar tu voz?» Me pregunto, ¿cuántas veces Dios nos ha hablado cuando no estábamos escuchando? ¿Cuántas veces habrá tenido Dios algo específico que necesitábamos oír pero hemos estado demasiado atareados para atenderle? Durante mi ministerio hubo una época cuando estaba demasiado ocupado trabajando en la obra del Señorcorno para escuchar Su voz. Predicaba seis veces por semana, preparaba dos programas para la televisión y viajaba por todo el país; estaba escribiendo un libro y pastoreando una iglesia grande; dirigía a todo su personal así corno también un ministerio radiofónico, entre otras obligaciones diarias. Corno resultado de toda esa actividad fui a parar al hospital por una semana y quedé fuera decirculación durante tres meses. Cuando pienso en esa época, me doy cuenta que Dios estaba tratando de atraer mi atención por medio de mi cuerpo, pero yo no escuchaba. Finalmente, llegó el momento en que ya no pude seguir adelante. Creo que una de las lecciones más valiosas que jamás podremos aprender es cómo escuchar a Dios. En medio de nuestra vida tan compleja y ajetreada no hay nada más urgente, nadamás necesario, nada más provechoso que escuchar lo que Dios tiene que decirnos. Además, la Biblia es muy explícita y Dios nos habla con tanto poder hoy corno en los días cuando fue escrita. Su voz espera ser escuchada y, cuando la escucharnos, nos vernos lanzados a la aventura más grandiosa y más emocionante que podamos imaginar.
La primera y principal es que Dios nos ama tanto como amaba a su...
Regístrate para leer el documento completo.