Como Evitar Accidentes En El Hogar.
Por: Arq. Yolanda Lozano
“Desde que en 1996 la Asamblea Mundial de la Salud consideró a los accidentes como un problema de salud, se viene reportando a través de todos estos años que este evento constituye la primera causa de muerte a nivel mundial en edades de 1 a 4 años, y nuestro país se ha mantenido reportando este evento con una incidencia similar ala expresada a nivel mundial”. (1).
La Organización Mundial de la Salud (O.M.S) define al accidente como un acontecimiento fortuito, generalmente desgraciado o dañino, que ocurre independientemente de la voluntad humana, provocado por una fuerza exterior que actúa rápidamente y que se manifiesta por la aparición orgánica o trastornos mentales.
En Baja California ocupamos el 46.4% demaltrato infantil por omisión de cuidados, según fuente de INEGI, 2002-2004.(2)
Era el año de 1960 una mañana de marzo, semana santa cuando apenas comenzaba el calorcito, de pronto escucho a mi madre gritar, corre, corre, ve a la farmacia de don Juanito y tráeme rápido una pomada amarilla que se llama picrato de furacín, con mis escasos años era una palabra muy difícil, más por la angustia ydesesperación con la que me gritó mi madre, que apenas le pude entender lo que decía. Me subí a mi bicicleta y tan rápido como me daban mis pedaleadas me fui rumbo a la farmacia.
Picrato de furacín, repetía y repetía a lo largo de mi trayecto para que no se me olvidara el nombre, la única farmacia más cerca de mi casa era la de Don Juanito que estaba a 12 cuadras de esas interminables, entrebrincos, baches y perros ladrando que salían a mi paso.
Al fin pude llegar, salté de la bicicleta y corriendo entré a la farmacia, gritando, sofocada, Don Juanito, Don Juanito al ver que tardaba en salir le grité más fuerte. Salió limpiándose los lentes “calma niña, calma, qué te pasa” al verle salir me quedé impresionada y quedé como hipnotizada al verle el tamaño de la panza que portaba unmandil blanco con la leyenda “mejor, mejora, mejoral”, me volvió a preguntar, “qué quieres”, parpadee, quise sacar palabras de mi boca, hice el intento, se me había olvidado el nombre que mi madre me había dicho. Me sentí tan angustiada que le dije quiero una pomada amarilla que creo que se llama serafín.
Escuché sonora carcajada, moviendo de arriba a abajo su enorme bulto que traía como panza,se fue a la parte de atrás de la farmacia y se tardó tanto tiempo que para mi fueron horas. Pensando en la angustia con la que mi madre me había solicitado el medicamento me empecé a inquietar. Apúrese Don Juanito, le grité, que tengo prisa.
Ya voy, ya voy, salió con un envoltorio de papel café y dijo son 4.50, ¿queeé?, se me cayó el mundo encima porque no traía dinero, con las prisas se lesolvidó darme con que pagar la medicina. Ruborizada le balbuceé tan bajito que no quería que me escuchara, no traigo dinero.”Qué” dijo con un resoplo, no traigo dinero le dije toda ruborizada “Hay niña”, moviendo la cabeza de lado a lado, con un gesto de desacuerdo, “llévatelo se lo apunto a tu papá”.
Me fui de ahí tan rápido como mis pies pudieron pedalear la bicicleta, pensando qué buenoque este señor conoce a mi papá.
Me bajé de la bicicleta casi de un brinco, cuando llegué a mi casa, no había nadie, ni mi abuela que vivía a lado de casa, ni mis tíos que vivían en la casa de atrás de la mía. Me sentí tan desesperada, que no alcanzaba a comprender dónde estaban todos y para qué era esa medicina que me habían pedido. Llegó mi vecina “la Rita” y me dijo, vente mi‘hijita, te vasa quedar en mi casa, te voy a cuidar porque se llevaron a tu hermanita al hospital, abrí tanto los ojos que sentía que se me iban a salir de su cuenca, con una opresión en mi pecho que apenas podía respirar le pregunté a mi vecina, qué le paso a mi hermanita, por qué se la llevaron al hospital, mira “mi’hijita” dijo “la Rita”, cuando tu mamá estaba haciendo los chiles rellenos, se le...
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