Comportamiento Chileno
Luego me vino a la cabeza otra pregunta “¿Así mismo nos mirarán en los barrios altosde Santiago?”. Y, pensándolo bien, creo que sí, ya que no tendríamos muchos recursos como ellos y, tal vez, si hubiéramos llegado en ese mismo bus, para ellos, hubiera sido muy pobre”.
En ese momento pensé, que algo había, un lazo, algo que nos unía a todos nosotros, los chilenos, no era nuestra educación, tampoco nuestro estatus social, era otra cosa: nuestro comportamiento.
Desde ese día,empecé a ver lo que nosotros somos, a nuestro personaje que, a la vez sorprende con sus actitudes y maravilla con su intelecto, he visto rasgos característicos y parecidos con los de hace dos siglos atrás.
Al mirar este comportamiento un poco más, veo que, al hacer un paralelo entre el antiguo chileno y nosotros en el tiempo actual, este no ha cambiado mucho, si esto generalizado, ya que, aligual que en todo ser humano, siempre algo cambia.
Por esto, quiero ver que es lo que ha cambiado, ha seguido estando presente en el comportamiento chileno, compararlo con el presente y ver si esto se puede cambiar de un modo u otro.
Carlos Javier Ávila Gorostiaga.
Autor del texto.
Desde el día de mi “salida pedagógica”, empecé a anotar en una pequeña libreta rasgos que noscaracterizaban a nosotros, comparándolos con los antiguos rasgos de los antiguos chilenos que José Victorino Lastarria relata en su texto “El Manuscrito del Diablo: La Sociedad”
Podemos ver, como ejemplo, los círculos entre amigos, los cuales excluyen a las demás personas por no tener afinidades con ellas. Y más aún, esto se ve, desde nuestro nacimiento, hasta nuestra ancianidad, ejemplificando esto desdelos grupos de pequeños niños de preescolar, los cuales no se quieren juntar con los demás por no querer prestar sus juguetes hasta, un grupo de ancianos, los cuales no se quieren juntar con otros por sus ideales o formas de comportarse.
Según Lastarria, pasaba exactamente lo mismo en aquel periodo de la República Conservadora de 1831 a 1861: “La sociedad está dividida en círculos, algunos deellos tan estrechos, que se componen exclusivamente de los miembros de una sola familia”1.
Además, entre las personas hay muchos prejuicios, más todavía entre los chilenos y, podríamos decir peor, de chilenos a extranjeros.
Como dije en mi relato, la gente nos miraba muy raro, pensando en que sería lo que íbamos a hacer allá, a qué íbamos a ese museo o hasta por qué los mirábamos así.
Lagente se ve y es muy prejuiciosa, ya antes de hablar con uno, ya cree que uno, por como hasta va vestido, puede ser un pobre, un ladrón o hasta un “lanza”. Ahora, me gustaría que imagináramos una situación, en la cual se ve a un vagabundo caminando por las calles del Paseo Ahumada, ¿cuál será la reacción o reacciones de los demás?: “Que le pasa a este tipo” o: “Por que no trabaja para comprarse...
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