Comunicación

“quiero
tomarte
una foto”

INTRODUCCIÓN
“Quisiera tomarte una foto.” Esta puede ser una
declaración totalmente casual. O puede expresar su
deseo de extender el momento de un vistazo inicial,
un chispazo de fascinación que ya ha tenido lugar. O
puede funcionar como una especie de mantra, cargado con la esperanza de propiciar todas las condiciones necesarias para que esa primera chispapueda
convertirse en fuego.
Si uno pide permiso cortésmente a alguien -“¿le
puedo tomar una foto?”- lo más probable es que uno
se está dirigiendo a un extraño. Si, por otra parte,
uno dice “me gustaría hacerte un retrato”, las circunstancias son enteramente diferentes. Primero que
todo, uno probablemente conoce a esa persona.
Segundo, y quizás lo más importante, es el hecho de
cial.Portentosa, cargada de gravedad y de una sutil
persuasión, sin decir realmente nada acerca de lo
que uno quiere, enfatiza, sin embargo, la seriedad de
portamiento de nuestro sujeto, abriéndole la puerta
a la ansiedad y la trepidación (“¿debería verme
serio?”, “¿debería llevar ropa especial?”… hay dos
posibilidades). Esto, a su vez, puede también inhibir
posibles jugueteos y experimentaciones.
Unretrato, el resultado de un proceso consensual,
depende de que un sujeto acepte el hecho de ser
mente, el sujeto mira a la cámara, y el contrato entre
sujeto y fotógrafo permanece papable en el aire que
los separa. Es a través de este convenio sobre la
distancia que se negocian toda clase de relaciones de
poder y tensiones entre o alrededor de las personas
involucradas. La fotografía mismaes el registro de
este intercambio.
de muchas maneras diferentes y desde un número
diverso de perspectivas. Está dirigido a personas que
están ya relacionadas con la fotografía. Se asume, de
parte de los lectores, la existencia de una competencia básica en manejo de cámaras, cuarto oscuro y/o
programas digitales de procesamiento de imágenes;
aunque ésto no sean indispensable para entenderla
mayor parte del libro. Los asuntos técnicos discutidos aquí se limitan a elementos clave del proceso
de captura de imágenes, y pueden ser encontrados
fácilmente en los tres apéndices.

Sin embargo, este es un libro práctico. Discute temas
de contenido, prestando atención a la historia, la teoría y el análisis formal a través de su recorrido. Se le
ha prestado especial atención a losdiferentes aspectos del proceso de hacer fotografías, y a las condiciopara realizar; diferentes clases de fotografías por
existen amplias discusiones con fotógrafos sobre
imágenes. Algunas de estas imágenes son retratos en
el sentido clásico de la palabra (son imágenes semejantes, o fotos que exploran ideas acerca de la personalidad individual de una manera predecible), y otras
no (como ciertasfotografías callejeras o de puestas
en escena).
Lo que es común a todas las imágenes implicadas en
una persona o un grupo de personas del otro lado del
lente. Pero hay algo más de igual importancia, algo
que no es literalmente visible en la imagen. Es algo
muy aparte de la manifestación del sujeto. Es lo que
Es la presencia de la mirada y el pensamiento del
fotógrafo. Este ingrediente, si esque podemos llamarlo así, no es sólo un requisito [a way station] en
el proceso de hacer una foto. No puede ser reducido
a una explosión de entusiasmo, un concepto brillante,
una estrategia de composición, o un capricho estilístico. Esta característica, este algo que habita una fotografía, es la actividad patente de alguien mirando, el
fotógrafo en persona, embebido en la foto.
En la medidaen que usted, como lector, pueda desear
elaborar retratos sustanciales, fotos de personas, el
ingrediente catalizador en su foto debe sentirse como
un momento intercambiado entre usted y su sujeto,
un chispazo en el espacio vacío entre ambos, tan
breve como un parpadeo. O puede manifestarse en
do a la vez como nada más que su propio vago, pero
intenso, deseo de lograr una buena fotografía...