Comunicación, Episteme Y Demás Opio.

Comunicación, episteme y demás opio
¿Es la Comunicación una ciencia?
Y con esta pregunta podremos mantener ocupados a los interesados durante muchos años. Para empezar, es necesariodefinir un objeto de estudio. Otros años más debatiendo acerca de ello. Supongamos que se han puesto de acuerdo. Bien. Ahora pasemos al método… ¿es necesario continuar con la tortura?
Diversosautores han emitido sus opiniones, incluso escrito libros cuyo tema central es la cientificidad de la Comunicación. Me parece que profundizar en ella es válido siempre que se generen ideasnuevas y productivas, puesto que se corre el riesgo de quedar enfrascado en un continuum intentando llegar a la Verdad universal.
Con esto, surgen dos conceptos: comunicador y comunicólogo.La diferencia entre ambos es delgada, pero firme. El primero se podría decir que es el experto en las TIC, mientras que el segundo le ha dado a la Comunicación una importancia primordial,incluso como factor explicativo de la realidad.
Existen autores, como Jesús Galindo, que se valen de términos como la comunicología para acentuar esa diferencia entre comunicador ycomunicólogo. Me parece atinado, sin embargo, de nuevo es necesario luchar para que el concepto sea reconocido mediante hechos y no sólo se busque la distinción como título burocrático.
Se mencionancomo principales comunicólogos a G.H. Mead, G. Bateson, C. Levi-Strauss y A. Moles, autores cuyas lecturas no son tan solicitadas dentro del campo de la Publicidad, pero que deberían serlodebido a su importancia histórica.
Las posturas continuarán divididas, con argumentos válidos por ambos bandos, pero lo que resulta un hecho indiscutible es la necesidad de estudiar a laComunicación, sea una ciencia o no, está presente a diario como fenómeno social, por lo que podemos afirmar su cientificidad o negarla, pero lo que jamás podrá ser perdonado es ignorarla.