Comunicación

Ha pasado ya mucho tiempo desde aquella noche que las cinco estuvimos juntas por última vez, en la que prometimos nunca separarnos y permanecer unidas pasara lo que pasara, pero la vida nos tenia preparados otros panes en donde el destino cambiaria el sentido de nuestras vidas.
Aun puedo recordar ese aroma a pino en las horas de estudio bajo ese gran árbol que se convirtió en nuestroconfidente, puedo sentir el césped fresco recién cortado, puedo escuchar la música de los pájaros que nos despertaban temprano por las mañanas, sigo sintiendo las miradas y sonrisas de medio día y el frio helado al anochecer. Lo recuerdo todo como si fuera una película en cámara lenta para poder apreciar cada uno de los detalles.
Íbamos por la carretera hacia un lugar llamado Troy en Nueva York, recuerdoque era un día soleado y mis padres me llevaban a mi nueva escuela. Mi madre siempre me dijo que la escuela era la mejor etapa de la vida y que el instituto Emma Willard para señoritas seria el lugar que mas podría amar en este mundo, yo no estaba nada de acuerdo pues mis padres me habían forzado a abandonar mi escuela, mis amigos y lo más importante el amor de mi vida.
Toda mi familia siempreha acudido a este tipo de escuelas ya sean hombres o mujeres en donde empiezan y terminan sus estudios, pero mis padres siempre nos dieron la libertad de soñar y explorar el mundo que existe fuera, pero al verse presionados por nuestra familia acerca de nuestra educación decidieron enviarnos a mi hermano y a mí a los internados que mi familia ha frecuentado durante años. A mi hermano lo enviaron aChicago a una escuela que no estaba nada mal y en donde podría jugar futbol todo el día, el estaba realmente feliz pues podría jugar a un nivel profesional y si era lo suficientemente bueno un equipo podría contratarlo, pero en cambio yo sentí que mis sueños terminaban.
Al llegar al instituto y bajar del coche me encontré con un edificio estilo georgiano, parecía realmente un palacio antiguo,caminamos por el sendero que nos llevo directo a una puerta abierta de par en par con un letrero que decía “Bienvenidas” y al pie de la entrada se elevaba una escalera de madera donde la mayoría de las personas subían así que las seguimos, mi padre me ayudo a subir mis maletas mientras que mi madre fue a reportar mi llegada. Seguimos caminado por el amplio pasillo el cual era un desastre, habíamuchas personas y pude observar viejas amistades volviéndose a encontrar y hablando acerca de cada detalle de su verano, algunas otras niñas despidiéndose de su familia y otras gritando de la emoción al ver a sus amigas , en ese momento pensé que este año no sería igual, tendría que volver a empezar y encontrar mi lugar en el mundo o bueno en esta escuela, no podía llegar de la nada con una de estasdesconocidas a contarles cada detalle de mi verano o de mi vida, nunca lo entenderían. Si yo odiaba algo era ser nueva y tener que conocer a nuevas personas y peor aún me tocaba compartir un cuarto con quien sabe quien, “y bien, ¿cuál es mi habitación?” “subiendo las escaleras la única puerta” mi madre dijo acercándose a nosotros con una sonrisa. Caminamos por el corredor en silencio hasta llegara unas escaleras en espiral que conducían a mi habitación, subimos las escaleras y llegamos a una gran puerta de manera con el número 1450 en letras doradas, mi padre abrió la puerta y entramos los tres. El cuarto era realmente grande tenía una sala color verde con pequeñas almohadas , un librero color marrón totalmente vacío y una chimenea enfrente de la sala “ es grande, que bien” dijo mipadre “ y es diferente a los demás cuartos” “ me dijeron en la recepción que es el único cuarto de cinco personas” dijo mi mama “pfft genial más personas”. Me decidí a dar una vuelta por el lugar, no estaba nada mal pero la idea de compartir absolutamente todo con estas cuatro desconocidas no me gustaba mucho. Me encontré con otra puerta la abrí y me encontré con 5 camas bien acomodadas, dos a los...