Conclusfffdión

Conclusión
Las numerosas características de agresión y atentado contra la mujer, niño, niño y adolecente, se ven expresada diariamente en las moradas dominicanas y del mundo atravesando el círculode la violencia que, en la generalidad de los casos, suele dejar una o diversas victimas. A palabra honestidad se emplea aquí como equivalente a moralidad sexual. Son pues los delitos contenidos bajoeste título, hechos que infringe la moralidad sexual. Pero no todos los actos que constituyen una violencia de actos moral sexual hoy reconocida están reprimidos por el código penal, no, el derechopenal tiene un campo mucho menos vasto que el de la moral y esta esfera peculiar de la vida sexual no puede aspirar a imponer la observancia de todos los deberes proclamados por la ética sexual, sinotan solos en aquellos cuyo cumplimiento repute necesario, para la convivencia social. En el derecho penal no puede el campo sexual, ni es su misión, tender a la moralización del individuo, a apartarledel vicio de la sexualidad, su actuación se reduce al castigo de aquellos hechos lesionan gravemente bienes jurídicos individuales o colectivos, y ponen en peligro la vida social. De los hechoslesivos de la moralidad sexual que el código sanciona, unos constituyen predominantemente un ataque contra la libertad sexual, es decir, contra la libertad del individuo de disponer sexualmente de sucuerpo, como el comercio carnal realizado mediante violencia o intimidación, o con personas que no pueden prestar su consentimiento por su edad o por otra causas, los abusos deshonestos cuandoconcurrieren las anteriores circunstancias, el yacimiento mediante engaño con personas menores, etc. Aquí se incluye el delito de violencia, delito en que la violencia origine disminución de la libertad de laofendida o la anula por completo. Semejante denominación de delitos contra la honestidad es clásica en nuestra codificación penal, pues a partir de 1848 todos nuestros penales la han empleado....