Constitución De Átomos
Páginas: 29 (7199 palabras)
Publicado: 26 de noviembre de 2012
LA NUEVA PROFECÍA
REHACER EL TEJIDO DE LAS RELACIONES HUMANAS
RECONSTRUIR LA COMUNIDAD, IMAGEN DEL ROSTRO DE DIOS.
P. Carlos Mesters, O. Carm.
El Padre Carlos Mesters, O. Carm., nació en Holanda el 20 de octubre de 1931. En 1949, siendo todavía estudiante en el seminario menor carmelitano, partió, con siete compañeros, a Brasil con el fin de ser misionero. Entró en la Ordendel Carmen en 1952. Realizó sus estudios de Filosofía en São Paulo, Brasil. De 1954 a 1963, en Roma, en el Colegio Internacional San Alberto y en la Universidad Santo Tomás (Angelicum), realizó sus estudios teológicos, y en el Pontificio Instituto Bíblico y en la Escuela Bíblica de Jerusalén, los estudios bíblicos. En 1963 regresó a Brasil en donde estuvo como profesor de Biblia, en el seminario,hasta 1973. Desde 1973 trabaja con las Comunidades Eclesiales de Base ayudando al pueblo de Dios en la lectura y la comprensión de la Palabra de Dios. El Padre Carlos es uno de los fundadores del Centro Ecuménico de Estudios Bíblicos, en el cual fue director de 1977 a 1989. En 1987 formó parte del equipo que elaboró el proyecto " Tu Palabra es Vida" d la Conferencia de Religiosos de Brasil, queayuda a la formación bíblica de los religiosos. Desde 1987 participa en el INTERCAB, encuentros Inter-carmelitanos de Brasil. Actualmente es Asistente General de su Orden.
Original en portugués
I. En el tiempo en que ya no había profetas
La coyuntura eclesial en un mundo que se globaliza
Antiguamente, cuando los obispos de América Latina se reunían en asamblea, toda la prensaacompañaba el acontecimiento. Cuando fue la conferencia de Medellín hubo gran animación. El contexto de ese momento, 1968, estaba marcado por el viento renovador del Concilio Vaticano II, por la revolución mundial de la juventud, por el ambiente de la guerra fría, por las dictaduras en América Latina. Las palabras de los obispos tenían peso, alcanzaban los medios de comunicación y despertaron unmovimiento popular muy importante para la historia de nuestros pueblos. La conferencia de Medellín, relectura latinoamericana del Vaticano II, confirmó e irradió la teología de la liberación y se tornó fuente animadora de las Comunidades Eclesiales de Base, Puebla las confirmó y las profundizó. Fue una época bonita y promisoria. ¡Profética!
Hoy, la situación es otra. Cuando los obispos sereúnen, los medios de comunicación casi no lo informan. Ya no somos noticia. Muchos de los que lucharon en los anos 60 y 70, hoy se sienten cansados y frustrados. No es que hayan perdido la fe, sino que no saben cómo enfrentar el mundo nuevo con la fe antigua. Crece la secularización. Resulta difícil imaginar que una comunidad de base del interior del país pueda enfrentar al Fondo MonetarioInternacional pidiéndole que sea consecuente con el Evangelio. ¡El imperio tiene otros dioses y otras leyes!
Algunos encuentran que la teología de la liberación y las comunidades eclesiales de base pertenecen al pasado. Ahora es la hora de los movimientos internacionales.
La línea divisoria fue el avance del imperio neoliberal y la caída del muro de Berlín. La alternativa que parecía ibaa dar resultado se desintegró y hasta el momento no ha aparecido otra. En muchos países, las elecciones parecen un péndulo: cuando la derecha no agrada, se pasa a la izquierda y donde la izquierda no agradó se pasó a la derecha. No se vislumbra un rumbo claro que apunte para el futuro. Aparecen en el horizonte nuevos peligros: la amenaza ecológica y atómica; enfermedades nuevas, injustadistribución de la riqueza, violencia galopante, amenaza de guerra religiosa a nivel mundial, etc. Con desesperación, la humanidad busca una salida, suspirando por alguna profecía que le indique el camino. Mientras tanto, la Iglesia está, cada vez más, vuelta sobre sí misma y sus problemas internos, más clerical, menos comprometida con las luchas populares. ¡Menos profética!
En este tiempo...
REHACER EL TEJIDO DE LAS RELACIONES HUMANAS
RECONSTRUIR LA COMUNIDAD, IMAGEN DEL ROSTRO DE DIOS.
P. Carlos Mesters, O. Carm.
El Padre Carlos Mesters, O. Carm., nació en Holanda el 20 de octubre de 1931. En 1949, siendo todavía estudiante en el seminario menor carmelitano, partió, con siete compañeros, a Brasil con el fin de ser misionero. Entró en la Ordendel Carmen en 1952. Realizó sus estudios de Filosofía en São Paulo, Brasil. De 1954 a 1963, en Roma, en el Colegio Internacional San Alberto y en la Universidad Santo Tomás (Angelicum), realizó sus estudios teológicos, y en el Pontificio Instituto Bíblico y en la Escuela Bíblica de Jerusalén, los estudios bíblicos. En 1963 regresó a Brasil en donde estuvo como profesor de Biblia, en el seminario,hasta 1973. Desde 1973 trabaja con las Comunidades Eclesiales de Base ayudando al pueblo de Dios en la lectura y la comprensión de la Palabra de Dios. El Padre Carlos es uno de los fundadores del Centro Ecuménico de Estudios Bíblicos, en el cual fue director de 1977 a 1989. En 1987 formó parte del equipo que elaboró el proyecto " Tu Palabra es Vida" d la Conferencia de Religiosos de Brasil, queayuda a la formación bíblica de los religiosos. Desde 1987 participa en el INTERCAB, encuentros Inter-carmelitanos de Brasil. Actualmente es Asistente General de su Orden.
Original en portugués
I. En el tiempo en que ya no había profetas
La coyuntura eclesial en un mundo que se globaliza
Antiguamente, cuando los obispos de América Latina se reunían en asamblea, toda la prensaacompañaba el acontecimiento. Cuando fue la conferencia de Medellín hubo gran animación. El contexto de ese momento, 1968, estaba marcado por el viento renovador del Concilio Vaticano II, por la revolución mundial de la juventud, por el ambiente de la guerra fría, por las dictaduras en América Latina. Las palabras de los obispos tenían peso, alcanzaban los medios de comunicación y despertaron unmovimiento popular muy importante para la historia de nuestros pueblos. La conferencia de Medellín, relectura latinoamericana del Vaticano II, confirmó e irradió la teología de la liberación y se tornó fuente animadora de las Comunidades Eclesiales de Base, Puebla las confirmó y las profundizó. Fue una época bonita y promisoria. ¡Profética!
Hoy, la situación es otra. Cuando los obispos sereúnen, los medios de comunicación casi no lo informan. Ya no somos noticia. Muchos de los que lucharon en los anos 60 y 70, hoy se sienten cansados y frustrados. No es que hayan perdido la fe, sino que no saben cómo enfrentar el mundo nuevo con la fe antigua. Crece la secularización. Resulta difícil imaginar que una comunidad de base del interior del país pueda enfrentar al Fondo MonetarioInternacional pidiéndole que sea consecuente con el Evangelio. ¡El imperio tiene otros dioses y otras leyes!
Algunos encuentran que la teología de la liberación y las comunidades eclesiales de base pertenecen al pasado. Ahora es la hora de los movimientos internacionales.
La línea divisoria fue el avance del imperio neoliberal y la caída del muro de Berlín. La alternativa que parecía ibaa dar resultado se desintegró y hasta el momento no ha aparecido otra. En muchos países, las elecciones parecen un péndulo: cuando la derecha no agrada, se pasa a la izquierda y donde la izquierda no agradó se pasó a la derecha. No se vislumbra un rumbo claro que apunte para el futuro. Aparecen en el horizonte nuevos peligros: la amenaza ecológica y atómica; enfermedades nuevas, injustadistribución de la riqueza, violencia galopante, amenaza de guerra religiosa a nivel mundial, etc. Con desesperación, la humanidad busca una salida, suspirando por alguna profecía que le indique el camino. Mientras tanto, la Iglesia está, cada vez más, vuelta sobre sí misma y sus problemas internos, más clerical, menos comprometida con las luchas populares. ¡Menos profética!
En este tiempo...
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