constitucionalismo
No estamos celebrando solamente la Constitución de 1917, también la de 1857 y el largo peregrinar que nos llevó, desde antes de la fundación de la República a establecer normas "superiores a todo hombre" sobre las que se expandiera la realización de todos los ciudadanos.Estamos rindiendo homenaje al movimiento constitucionalista mexicano y comprometiéndonos a renovarlo conforme a las necesidades e imperativos de nuestra época.
El constitucionalismo es la concreción de las luchas libertarias de nuestro pueblo. Corresponde a la necesidad de establecer límites a la autoridad y derechos inalienables para los individuos, de conformar un Estado laico, al margen delas sectas y los dogmatismos, equilibrar los poderes y descentralizar su ejercicio, asegurar la soberanía del país sobre sus recursos y distribuir con equidad el ingreso y el acceso al bienestar. Es en suma un modelo progresivo de existencia republicana.
Este siglo ha conocido en el mundo y en nuestro propio país un nuevo ciclo de constituciones que se avocan a resolver problemas emergentes. Elprimero es la ampliación y protección de los derechos humanos de acuerdo a los tratados y convenciones internacionales más avanzados; enseguida, el incremento de la participación directa de la sociedad en la toma de decisiones a efecto de superar la crisis de la representación política: la conversión de los electores en ciudadanos plenos. El fortalecimiento de la organización republicana mediante laverdadera independencia de los poderes y su control mutuo, la multiplicación de las instancias autónomas responsables de vigilarlos y la efectiva rendición de cuentas que erradique la corrupción. Dentro de ese marco democrático es menester incrementar la autoridad legítima del Estado contra los llamados poderes fácticos, sean el crimen organizado, las finanzas transnacionales, los monopoliosilegales o las distorsiones de los imperios televisivos.
Estamos ya cerca de conmemorar- sólo cuatro años- el centenario de la Constitución vigente. Hace tiempo hemos propuesto que debiéramos celebrar esa fecha con el debate y aprobación de una Carta Magna integralmente renovada: la Constitución mexicana del siglo XXI. Ciertamente, hemos modificado y parchado la actual innumerables veces en cercade dos tercios de sus artículos, de acuerdo a las circunstancias y a las agendas sexenales. Por qué no tomamos el texto por los cuernos y nos decidimos a elaborar una nueva, coherente, contemporánea y atenta a los reclamos del porvenir.
Nos proponemos iniciar la tarea desde nuestra propia casa: esta noble y precursora Ciudad de México. Aquí se inició en 1808 el empeño de devolver lasoberanía a los pueblos, gracias al talento y enjundia de Primo de Verdad, síndico del Ayuntamiento de la Ciudad, que luego recogieron las gestas de la independencia. Con la fundación de la República se creó en 1824 el Distrito Federal, pero aunque sobrevivieron durante más de un siglo los municipios en la capital, nunca se concedieron derechos plenos a los ciudadanos ni un estatuto semejante al quedisfrutan las demás entidades del país.
Desde 1996 tenemos el derecho a elegir nuestros gobernantes. Fue un proceso paralelo a la transición democrática que liquidó el antiguo sistema de partido hegemónico y se tradujo en el precario pluralismo que vivimos. La gente había tomado ya las calles cuando el terremoto de 1985 y no las ha abandonado hasta ahora. Sucesivos gobiernos de izquierda han...
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