Consumidor

TRABAJO SOBRE LA FELICIDAD PARADÓGICA
Ensayo sobre la sociedad de hiperconsumo

PRESENTADO POR:
LINA MARÍA OTÁLORA GÓMEZ
140181

PRESENTADO A:
Dra. NÉLIDA ASILILI P.

UNIVERSIDAD DE LAS AMÉRICAS PUEBLA
TEORÍA DE LA PERSONALIDAD
Puebla, 7 de diciembre de 2009.

PRESENTACIÓN
Nace una nueva modernidad la “civilización del deseo” que se construyo durante la segunda mitad del sigloXX. Dedicado a la estimulación perpetua de la demanda, a la comercialización y la multiplicación infinita de las necesidades: el capitalismo de consumo ha ocupado el lugar de las economías de producción.

En apariencia, nada o casi nada ha cambiado. Sin embargo, en los dos últimos decenios se ha producido un nuevo “seísmo” que ha puesto fin a la buena y vieja sociedad de consumo, transformandotanto la organización de la oferta como las practicas cotidianas y el universo mental del consumismo moderno: la propia revolución del consumo ha sido revolucionada. Es la sociedad de hiperconsumo.

Se ha pasado al hiperconsumidor al acecho de experiencias emocionales y de mayor bienestar, de calidad de vida y de salud, de marcas y de autenticidad, de inmediatez y de comunicación. Poco a poco,el espíritu de consumo ha conseguido infiltrarse hasta las relaciones con la familia y la religión, con la política y el sindicalismo, con la cultura y el tiempo disponible.

El hiperconsumidor ya no está sólo deseoso de bienestar material: aparece como demandante exponencial de confort psíquico, de armonía interior y plenitud subjetiva y de ello dan de el florecimiento de las técnicas derivadasdel Desarrollo Personal y el éxito de las doctrinas orientales, las nuevas espiritualidades, las guías de la felicidad y la sabiduría.

La felicidad interior vuelve a estar “sobre el tapete” convirtiéndose en un segmento comercial, en un objeto de marketing que el hiperconsumidor quiere tener a mano, sin esfuerzo, enseguida y por todos los medios.

La inmensa mayoría se declara feliz, apesar de lo cual la tristeza y la tensión, las depresiones y la ansiedad forman un rio que crece de manera inquietante. La gente se declara mayoritariamente feliz pensando que los demás no lo son. Jamás se han dedicado tanto los padres a satisfacer los deseos de los hijos, jamás ha habido tantas conductas problemáticas ni tantas enfermedades mentales.

Aunque nos curan cada vez mejor, eso no impideque el individuo se este convirtiendo en una especie de hipocondriaco crónico. Los cuerpos son libres, la infelicidad sexual persiste. Las incitaciones al hedonismo están por todas partes: las decepciones, las inseguridades sociales y personales aumentan. Son estos aspectos que hacen de la sociedad de hiperconsumo la civilización de la felicidad paradójica.

Por un lado, la sociedad dehiperconsumo exalta los referentes del mayor bienestar, la armonía el equilibrio: por el otro se presenta como un sistema hipertrofiado e incontrolado, un orden bulímico que lleva al extremo y la caos y que ve que la opulencia convive con el aumento de las desigualdades y el subconsumo.

La era de la felicidad paradójica reclama soluciones igualmente paradójicas. Esta claro que necesitamos menosconsumo, entendido este como imaginario multiplicador de la satisfacción y como excrecencia incontrolada de las conductas individuales. Pero por otro lado también necesitamos más consumo: para que retroceda la pobreza, pero también para ayudar a la tercera edad, para mejorar las condiciones de la salud pública, saborear experiencias nuevas.

PRIMERA PARTE: LA SOCIEDAD DE HIPERCONSUMO
Sociedad deconsumo: la expresión se oye por primera vez en los años 20, se populariza en los 50 y su fortuna prosigue hasta nuestros días. Se presenta como una de las figuras más emblemáticas del orden económico y de la vida cotidiana de las sociedades actuales.

La dinámica expansiva de las necesidades prosigue, pero cargada con nuevos significados colectivos e individuales. El consumidor que deambula por...