Consumo & collage emocional
Sociedades del Sensacionalismo
Las pantallas liquidas de todos los tamaños, con seductores y destellantes juegos de luces y colores transmiten sin limites de tiempo y espacio las nuevas lógicas del mercado, lógicas que a través de la sensualidad de los cuerpos y la constante pero siempre novísima muestra de variados productos, esperan de la sociedad, no elconsumo que se justifique por si mismo, en términos de necesidad o supervivencia, sino en términos de una “praxis de lo deseante”, pues, ya se ha roto el anatema para quienes quieren consumir más de la cuenta, la concupiscencia y la codicia se reproducen como valores y entre más rápida sea su práctica, más pronto deviene toda una estela de identidad y virtud, de fugaces sensaciones placenteras ymotivantes que confían empezar de nuevo y no fallar en el intento.
Se cierne, así, el continuo desenvolvimiento de las renovadas estructuras, que ha conllevado a que los comportamientos sociales se encuentren reglados por toda una trama de convencionalidades dependientes de un voluble sistema de correspondencia emocional, socialmente perceptivo y socialmente selectivo, un sistema que denaturaleza simbólica conlleva a los consumidores a vivir tiempos de ilusiones colectivas, época global donde los participes de las relaciones sociales definen sus estados emocionales a partir de la perseverancia siempre ávida y siempre conducente en la práctica consumista, el alcance y la asistencia en la última temporada que otorga a sus adeptos un esquema de apreciación y apropiación nuevo y mejorado,esquemas mentales que se hacen gustos, deseos, anhelos… donde la estructura del mercado espera a que ésta serie de sensaciones producidas y a la vez recibidas, respondan al ritmo de un sistema de clasificación y evaluación que quiere ser legitimo, no como un mecanismo céntrico sino como una introyectada reglamentación que se hace excéntrica y sin limites, reglas que conllevan a separar y dividir,entre lo que no se usa y lo que si se U.S.A, entre quienes pueden llevar a cumplimiento la emoción por comprar, y quienes no, en fin… construyendo muros entre quienes participan y no participan de las lógicas consumistas.
Las sociedades de consumo han sustituido el ágora como espacio para la reunión, exposición y superación de los disensos, por la pasarela como espacio por el cual desfilan todoslos deseos y anhelos derivados del mercado, donde lo único público no tiene otra presentación que el boom publicitario, que estalla entre la competencia desenfrenada y sin equilibrio entre los estratégicos usos y desusos del merchandising, tan adiaforico como toda lógica de sentidos y sensaciones vividas en el ambiente y la práctica apolítica de éste mundo descrito y proscrito.
Núnca antes, seha vivido experiencias tan vertiginosas, emocional y socialmente clasificatorias o estructuralmente clasantes (Bourdieu 1998) como los que viven las “sociedades software” descritas por Zygmunt Bauman (2007) o tan continuamente sometidas al poder de “la ilusión y el simulacro” como lo señala Jean Baudrillard (2002) en donde es necesario estar listos! Correr y ser participes de la última temporada,una temporada que siempre va ser la última, en donde las únicas oportunidades parecen fluir al saberse que ésta vez los fallidos consumistas pueden volver a intentarlo, esperando que ahora logren hacerlo de una forma mucho más mejorada, es así, pues, como al igual que las emociones que se dirigen al gusto y al placer por comprar, surge al unísono un conjunto de emociones negativas, estados deanimo que no quieren ser experimentados por los individuos, mucho menos imaginados, luego, son temores reales que suelen ser opacados por las sensaciones placenteras y el supuesto de un sistema de oportunidades, que en bastantes ocasiones funcionan como distractores, desenvolvimiento de miedos, que de naturaleza global, agobian y generan confusión, inseguridad, desconfianza, incertidumbre, vacío,...
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