contabildad

Un recorrido por los simientos de mi infancia

Caminar por la corniza de aquella ciudad bajo la incensante melancolía que abarcaba mi corazón, era una faena ardua procedente del deseo invasivo derecordar aquellos días de mi niñes donde recorrer esos pasajes, bajo el cálido sol de los atardeceres y el disfrute de un dulce helado, era una rutina esperada con anhelo.
Recuerdo su mano, fuertepara aquel entonces, presionar la mía en busca de brindar esa seguridad característica de su mirada, de su experiencia, de todos aquellos años de vivencia. Su rostro, adornado por el asomo de arrugas,reflejaba la felicidad que sentía al poder rememorar sus años de juventud, donde, al igual que yo ahora, solía realizar travesuras innimaginables.
Él, mi abuelo, llenaba de relatos mis tardes, hacíadel recorrido a casa una aventura llena de historias y sucesos olvidados. Recuerdo cuando me habló de la fundación, de aquellos años de lucha donde la sumisión era nuestro estado, donde unos pocosextranjeros lograron hacerse con la tierra nuestra, para construir una ciudad bajo el nombre de “La Villa de Catia”, donde años más tarde se edificaría el asfalto que pisamos ahora, adornado, por amboslados, de caceríos que han evolucionado con el tiempo.
Mi abuelo había nacido allí, en “la puerta de Caracas hacia el mundo” como él solía mencionar, ese pequeño poblado que se convertiría en el centrode múltiples vestigios de historias que constituyeron el apogeo de la Gran Capital Venezolana. Recuerdo aquella tarde, que sentados en el adoquín, me relató el arduo trabajo que había generado en loscitadinos de aquella época levantar las vías ferroviarias que habían servido, durante muchos años, de conector de toda la ciudad, incrementando, en gran medida, el auge comercial que se veníasuscitando para entonces. Recordar las fechas exactas eran toda una odisea para mí, a él se le daba muy bien, yo, por el contrario, soy un ser bastante despistado, las fechas nunca han sido lo mío pero lo...