contaminación
Lo que la fe católica cree acerca de María se funda en lo que cree acerca de Cristo, pero lo que enseña
sobre María ilumina a su vez la fe en Cristo (CEC 487)
María tiene una gran importancia dentro de lo que es la historia del hombre, de la iglesia. Por eso, es que
desde los inicios del cristianismo existió una profunda veneración a María ya que ellaformaba parte de las
acciones salvadoras de Dios. Ella está presente en la fe de la Iglesia desde siempre. La mirada de la fe,
unida al conjunto de la Revelación, puede descubrir las razones misteriosaspor las que Dios, en su
designio salvífico, quiso que su Hijo naciera de una mujer. Estas razones se refieren tanto a la persona y a
la misión redentora de Cristo como a la aceptación por María deesta misión para con los hombres (CEC
502)
Llamada en los evangelios "la Madre de Jesús" (Jn 2,1; 19,25), María es aclamada bajo el impulso del
Espíritu como "la madre de mi Señor" desde antes delnacimiento de su hijo (Lc 1,43). En efecto, aquél que
ella concibió como hombre, por obra del Espíritu Santo, y que se ha hecho verdaderamente su Hijo según la
carne, no es otro que el Hijo eternodel Padre, la segunda persona de la Santísima Trinidad. La Iglesia
confiesa que María es verdaderamente Madre de Dios ["Theotokos" palabra griega usada por la iglesia
antigua, significa: la madre deDios].(CEC 495)
Jesús es el Hijo único de María. Pero la maternidad espiritual de María se extiende a todos los hombres,
a los cuales Él vino a salvar: "Dio a luz al Hijo, al que Dios constituyóel mayor de muchos hermanos (Rm
8,29), es decir, de los creyentes, a cuyo nacimiento y educación colabora con amor de madre" (CEC 501)
Más tarde, otros Concilios apoyan con firmeza esta doctrina.El Concilio Vaticano II hace referencia del
dogma así: "Desde los tiempos más antiguos, la Bienaventurada Virgen es honrada con el título de
Madre de Dios, a cuyo amparo los fieles acuden con sus...
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