Contexto social
38. Dios conduce la historia por medio de su Espíritu. La situación actual de nuestro país y más concretamente de la Ciudad de México sonlugares teológicos que es necesario escrutar, para descubrir, también ahí, la voz apremiante de Dios que invita a todos a cooperar con su esfuerzo en la construcción de la única historia, que es tambiénhistoria de la salvación. Mirar desde la fe la realidad social es un deber de los pastores y de los cristianos, a fin de dialogar con ella y aceptar su interpelación (cf. LG 5-7). Al hacerlo estamoscumpliendo con la Misión que Jesús nos ha encomendado. En los "Pregones" de la Misión intensiva habrá de hacerse constante referencia a la realidad social.
39. Los anhelos que se expresan en elrechazo y las denuncias contra la violencia, la impunidad, la corrupción y otros males igualmente graves y generalizados hacen referencia a un nuevo proyecto de país que deseamos construir, donde lasrelaciones estén armonizadas por un real estado de derecho, reconocido y respetado por todos, y donde sea habitual el respeto, la aceptación y el diálogo.
40. Hay algunas urgencias apremiantes por lasque el país parece, al fin, querer transitar y es necesario defender y consolidar: la democracia, la justicia social y la lucha contra la corrupción.
La opción por los pobres
41. Una de lasrealidades más cuestionantes para creyentes y no creyentes, en nuestros días, es la condición de pobreza de tantos mexicanos hermanos nuestros, que en los campos y las ciudades y, por consecuencia, en lagran metrópoli de México, viven en condiciones de penuria, de sufrimiento, de ofensa a la dignidad humana.
Su situación contradice, en verdad, nuestra condición de cristianos.
42. El desafíopara la Iglesia arquidiocesana es no dejar de lado, en sus programas pastorales, a los pobres, excluidos y marginados junto con sus justas demandas, sino tomarlos en cuenta y asumir el compromiso de...
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