Contratransferencia
Conjunto de las manifestaciones del inconsciente del analista relacionadas con las manifestaciones de la transferencia del paciente.
Más aún que el concepto de transferencia, con el que está relacionada, la noción de contratransferencia, sus acepciones y utilizaciones, siempre han suscitado polémicas entre las diversas ramas del movimiento psicoanalítico.
En una cartaa Sigmund Freud del 22 de noviembre de 1908, Sandor Ferenczi fue el primero en mencionar la existencia de una reacción del analista a los dichos de su paciente: "Tengo una excesiva tendencia a considerar como propios los asuntos de los enfermos". Freud empleó por primera vez el término "contratransferencia", entre comillas, en una carta a Carl Gustav Jung del 7 de junio de 1909. Pero fue en 1910, en su evaluación de las perspectivas para el futuro de la terapia psicoanalítica, cuando evocó, hablando de la persona del terapeuta, la existencia de una contratransferencia que "se instala en el médico por la influencia del paciente sobre la sensibilidad inconsciente" del primero. Freud añadió que estaba cercano el momento en que se tendría derecho a "plantear la exigencia de que el médicoreconozca en sí mismo esa contratransferencia, y la domine". Sabiendo que ningún analista puede ir más allá de lo que le permiten sus resistencias interiores, "reclamamos -continúa Freud- [que el analista] inicie su actividad con un autoanálisis y lo profundice continuamente, conforme a sus experiencias con el enfermo".
En 1913, en una carta a Ludwig Binswanger, subraya que el problema de lacontratransferencia "es uno de los más difíciles de la técnica psicoanalítica". El analista -y ésta debe ser una regla según Freud- no debe nunca darle al analizante nada que provenga de su propio inconsciente. En cada caso tiene que "reconocer y superar su contratransferencia, para estar libre de sí mismo". Unos años más tarde, Freud observa que la aparición en la cura de un fenómeno que él denominaamor de transferencia puede ser para el analista la oportunidad de "desconfiar de una contratransferencia tal vez posible".
Después de estos enunciados, que se convirtieron en clásicos, la posición de Freud dejó de evolucionar, y nunca encaró la posibilidad de que la contratransferencia se utilizara de manera dinámica en el desarrollo de la cura.
El punto de vista de Ferenczi estuvo alprincipio calcado del de Freud. Subrayó la necesidad de que el analista "dominara" su contratransferencia. A sus ojos, ese dominio sólo podía resultar de un análisis, y debía distinguirse de una simple resistencia a la contratransferencia, en sí misma capaz de generar una rigidez artificial en el analista.
Más tarde, en la óptica de su retorno a la teoría del trauma, que iba a provocar undebilitamiento de sus vínculos con Freud, Ferenczi cambiará totalmente de dirección, realizando un desplazamiento en la concepción de la cura y preconizando la puesta en juego de la contratransferencia del analista.
Sensible a los atolladeros de ciertos tratamientos, Ferenczi desarrolló la idea del análisis mutuo, proceso en cuyo transcurso el analista le entrega al paciente los elementos constitutivos desu contratransferencia a medida que surgen, de tal manera que el paciente se vea liberado de la opresión ligada a la relación transferencial, y la artificialidad de la situación analítica clásica tienda a desaparecer.
Esta orientación tendrá posteridad. Explícitamente o no, se encuentra su sello en los trayectos psicoanalíticos ingleses (sobre todo en Donald Woods Winnicott y Masud Khan), y enlos desarrollos del psicoanálisis norteamericano, tanto entre los representantes de la corriente de la Self Psychology como en Harold Searles, un autor que elaboró en particular la idea de la simbiosis terapéutica.
En 1939, un discípulo de Ferenczi, Michael Balint, introdujo la idea de una ausencia de especificidad de la contratransferencia, estableciendo que hay que identificar sus huellas...
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