Contravida_ _Augusto_Roa_Bastos 23_04_2011

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h1Contravida - Augusto Roa Bastos/h1
h4por genesisdianaoc buenastareas.com/h4
Augusto Roa Bastosbr /
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Contravidabr /
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GRUPO EDITORIAL NORMAbr /
Barcelona Buenos Aires Caracas Guatemalabr /
Meacutexico Miami Panamaacute Quito SanJoseacute San Juanbr /
San Salvador Santafeacute de Bogotaacute Santiagobr /
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copyAugusto Roa Bastos, 1994br /
copyDe esta edicioacuten Editorial Norma S. A. 1995br /
Apartado 53550br /
Santafeacute de Bogotaacute, Colombiabr /
Disentildeo Camilo Umantildeabr /
Fotografiacuteas Viacutector Robledobr /
Impreso en Colombia por Editorial Presenciabr /
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Este libro fuecompuesto en caracteres br /
Berthold Poppl-Pontifexbr /
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Prohibida la reproduccioacuten total o parcial de esta obra br /
sin permiso escrito de la Editorialbr /
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CC 26008009br /
ISBN 958-04-2931-6br /
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A mi pueblo de Iturbebr /
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Primera partebr /
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1br /
Lo primero que percibiacute de mi cuerpo fue el hedor a carrontildea.br /
En la posturalisiada de los condenados, estaba semihundido en el lodo y la maleza. A traveacutes de las bolsas sanguinolentas de los paacuterpados, veiacutea borrosamente mi cuerpo, negro de moscas, de avispitas chupadoras, de las temibles hormigas tahyi-reuml que subiacutean en hileras por mis miembros.br /
El vaho salobre del viento que soplaba desde la bahiacutea me escociacutea las grietas purulentas de lasheridas, maacutes que los insectos. El calor y la muerte se moviacutean en el mismo viento.br /
No me sentiacutea del todo muerto, pero hubiera deseado estarlo como los demaacutes.br /
Lleveacute con gran esfuerzo la mano sobre el pecho. Pernotcibiacute los latidos de la sangre que se esparciacutea por el cuerpo como arena. El corazoacuten de un muerto no late, penseacute enel veacutertigo ondeantede la pesadilla.br /
Esa arena de sangre seca corriendo por mis venas formaba parte de esa pesadilla que ya no iba a cesar.br /
No era cadaacutever auacuten, pero llevaba la muerte en el pecho. Un enorme y aacutecido tumor Me llenaba todo el cuernotpo. Ocupaba mi lugar.br /
Ese tumor era luacutegubre porque era todaviacutea existencia.br /
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Unas mujeres de la Chacarita me habiacuteanrecogido de noche en una carretilla y me llevaron a un rancho lleno de humedad, de miseria, de luto.br /
iquestPor queacute en la Chacarita, ese lugar de inundaciones, de matones seccionaleros, de suntuosas mansiones de nuevos ricos, de pobladores sumidos en la miseria abnotsolutabr /
iquestQueacute fuerza de atraccioacuten, de instinto, de presentinotmiento, me habiacutea llevado hasta ese lugarbr/
Yo estaba inconsciente, de modo que en los primeros diacuteas no me daba cuenta de nada.br /
No podiacutea explicarme nada. No recordaba nada.br /
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Por esas mujeres supe despueacutes que habiacutea estado yanotciendo en el barro del potrero desde haciacutea por lo menos tres diacuteas, cuando empezoacute a propalarse por radio y telenotvisioacuten la noticia de la fuga.br /
Elazar es mi aliado, mi coacutemplice. br /
Seacute que es tambieacuten mi mortal enemigo. Juega conmigo de las maneras maacutes astutas y extrantildeas. Vivo bajo su signo y es seguro que bajo su signo exhalareacute tambieacuten el uacuteltimo suspiro.br /
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Los recuerdos no eran para miacute ahora maacutes que los henotchos relatados confusamente por esas mujeres que me observaban entre...