Cooperativas
La sociedad actual se encuentra ante una grande, histórica y total ruptura signada
por hechos de especial importancia, viejos y contradictorios unos y nuevos otros,
relacionadostodos con temas de ciencia, tecnología, cultura, política, economía,
religión y otras materias cuyos paradigmas han quedado destruidos o seriamente
afectados por los adelantos que, en todos los órdenesdel saber, han aparecido en
las últimas décadas.
De acuerdo con el pensamiento del politólogo norteamericano Owen Harries,1 la
noción política de Occidente ha dejado de tener vigencia al finalizarla guerra fría.
Tal noción había sido construida para validar una coalición estratégica frente a un
supuesto enemigo común: La economía socialista...
Tratadistas, como el citado, planteanproposiciones que hasta hace poco parecían
blasfemas pero que, ahora, son producto del proceso de globalización:
¿Debe Occidente dirigirse hacia el Este? ¿Y, con cual intención,
preguntamos, debe hacerlo?¿Para dominarlo?
¿Para aprender de él?
¿Para convivir?
Mientras la llamada civilización occidental se complace en pensar que los países del
Oriente, como el Japón, son también y al mismo modocapitalistas, por causas
complejas y como resultado de una dinámica histórica de muy difícil pronóstico se
derrumba lenta pero inexorablemente.
La humanidad se desgasta en una cultura de consumo y desuperficialidad que
aliena y condena a la depredación de todos los recursos del planeta, a sufrir
procesos de deterioro de la salud, violencia múltiple, desempleo, pérdida de la
calidad de vida ydegradación del ser humano, inmerso en un presente insoportable
y temeroso de un futuro que ya asusta a todos, incluidos quienes detentan la
riqueza y el poder derivado de esa masacre planetaria,inmersos todos en una gran
ruptura relacionada con una concepción aristotélica del mundo, creadora de una
1 Artículo: El colapso de Occidente. Revista Ciencia Política. Publicación de Tierra Firme....
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