Coplas por la muerte de su padre
COPLAS POR LA MUERTE DE SU PADRE
No recuerdo cuando las leí por primera vez porque son de las que llegan a la memoria y se quedan en ella sin origen, reveladoras, profundas, quizás un tanto punzantes. Recuerdo sí que ellas empezaron a ponerle nombre a lo que yo veía ya por todas partes: la fragilidad y fugacidad de la vida, la brevedad del placer, la tristeza de lacarne y la inexorabilidad de la muerte. Además que desde entonces su famoso símil entre los hombres y los ríos, ha sido una continua fuente de reflexión para mí. Su autor: Don Jorge Manrique. Don, porque su familia ostentaba títulos nobiliarios y era una de las más poderosas de la Castilla del Siglo XV, cuando España aún no era España. Y como Garcilaso de la Vega y Diego Hurtado de Mendoza, y comocorrespondía a su alcurnia y a las características de la época, Don Jorge no se le arrugó a eso de blandir la espada para defender sus intereses, y en su caso, a los emergentes reyes católicos, sobre todo a Isabel de Castilla contra Juana la Beltraneja. Así que antes que escritor, nuestro hombre fue guerrero, y no de los tímidos.
La obra que hasta ahora lo ha inmortalizado y es clásica entrela literatura española de todos los tiempos, es su poema titulado Coplas por la muerte de su padre. Con seguridad el nombre les es familiar y creo acertar al decir que ya la han leído. Sin meternos demasiado en los intríngulis métricos de la época pero sin dejarla de lado, digamos que fue escrita entre otras a copla de pie quebrado, inventada por su tío, el también notable poeta Diego GómezManrique, y que frente a ella, (la métrica de la época) estas trémulas estrofas resultaron prerrenacentistas, dado el tratamiento estilístico y el lenguaje llano utilizado por el poeta, en contraposición al almidonado, culto y latinizado de sus colegas de entonces.
Don Jorge Manrique logró como pocos usar la espada y la pluma como elementos de su manifestación vital, al punto de morir a causade herida recibida en combate. Con la pluma magnificaba la vida y el amor que su espada cegaba. Siempre que releo sus coplas me corre como un relámpago por la imaginación aquella época de Castilla. Los sueños de sus gentes, la vida que llevaban, las relaciones sociales de hierro que los determinaban, las refriegas en que participaban y los ideales que ardían en sus venas, tan efímeros sin embargoy ya bajo el olvido. Y no deja de admirarme que de aquellos hombres esforzados nos queden apenas algunas leyendas, algunos monumentos y edificios y algunos poemas, quizá más imborrables que los monumentos mismos. De todos ellos las coplas de Don Jorge, que ya han ganado los cien y los quinientos metros, con seguridad ganarán los diez mil y la gran maratón de la historia, frente a otros titanes queestremecen nuestros asombrados corazones de lectores.
Ahí les dejo las coplas.
COPLAS POR LA MUERTE DE SU PADRE
Recuerde el alma dormida,
avive el seso y despierte
contemplando
cómo se pasa la vida,
cómo se viene la muerte
tan callando,
cuán presto se va el placer,
cómo, después de acordado,
da dolor;
cómo, a nuestro parecer
cualquiera tiempo pasado
fue mejor.
Puessi vemos lo presente
cómo en un punto se es ido
y acabado,
si juzgamos sabiamente,
daremos lo no venido
por pasado.
No se engañe nadie, no,
pensando que ha de durar
lo que espera,
más que duró lo que vio
porque todo ha de pasar
por tal manera.
Nuestras vidas son los ríos
que van a dar en la mar,
que es el morir;
allí van los señoríos
derechos a se acabar
y consumir;
allí losríos caudales,
allí los otros medianos
y más chicos,
y llegados, son iguales
los que viven por sus manos
y los ricos.
Invocación:
Dejo las invocaciones
de los famosos poetas
y oradores;
no curo de sus ficciones,
que traen yerbas secretas
sus sabores;
A aquél sólo me encomiendo,
aquél sólo invoco yo
de verdad,
que en este mundo viviendo
el mundo no conoció
su deidad.
Este...
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