corea del norte

Campos de trabajo norcoreanos en Rusia o Cómo cocinar un No-ciudadano.
Corea del Norte firmó, bajo el régimen de Kim Jong- il, una serie de tratados con la fría pero colorida nación rusa. Por sus características, estos tratados proponen una serie de factores y actores que no escapan a las transacciones de bienes y servicios más comunes: tú, Corea del norte, tienes algo que quiero o necesito, tedoy dinero, lo obtengo. Hasta ahí estamos en presencia de una de tantas transacciones entre dos países con cierta cercanía territorial e ideológica en tiempos pasados. Nada inusual, nada de qué preocuparse si no fuera por un pequeño detalle que encierra una serie de implicancias que atacan las normas de lo normalmente aceptado; la mercancía de la que hablamos, no son sacos de arroz, no sonnisiquiera insumos nucleares, son los propios ciudadanos norcoreanos.
Así es, mientras el resto de países exporta bienes de consumo, materia prima diversa, tecnología, cultura, etc. Corea del Norte vende a sus propios ciudadanos como fuerza de trabajo para generarle ingresos a su estado. Si el totalitarismo militar que ejerce Corea del Norte y que es ya conocido por todos parecía poco, esta pequeña“perla” muestra, como trataremos de evidenciarlo en las siguientes líneas, lo que un estado deformado por la figura mesiánica y magnánima de su líder fundador puede llegar a causar: la anulación completa del concepto de ciudadano en los habitantes del “reino ermitaño”; incluso, podría decirse, estamos ante la deshumanización total y evidente de este pueblo.
En 2009, Shane Smith, un reporteroamericano del portal de noticias Vice.news, se adentró en la región de Amur en Siberia, Rusia para conocer de cerca la situación de los trabajadores norcoreanos en este país. Lo que encontró fue sorprendente: una vez salidos de su país, los ciudadanos de Corea del Norte llegan a aldeas instaladas en Rusia. Dichas aldeas cuentan no solo con la arquitectura propia de su país, sino que están plagadas depublicidad alegórica a la grandeza de su líder, cuentan con un horario establecido para estudiar la teoría Zuche desarrollada por el propio Kim Jong-il y, por supuesto, están obligados a permanecer siempre en estas instalaciones, algo que de ser incumplido sería (cómo no) tomado como traición a la patria, lo que implicaría un castigo que contempla la pena de muerte.
Por si esto fuera poco, no sonellos los que manejan sus propios contratos, sino el estado norcoreano, quien solo les paga unos cuantos centavos por día, dejando el excedente que paga Rusia en las arcas del estado.
Dentro de lo que Smith logra mostrar resalto dos hechos. El primero es el más evidente; algo está mal. Y el hecho de que existan ciudadanos que se atrevan a sortear a la muerte y escapen de estos lugares lodemuestra. Pero lo segundo es lo realmente preocupante. Dentro de este grupo se encuentra uno en especial que ha interiorizado la normativa impuesta por el estado y lo ha llevado a ser su premisa de vida. Es decir, aceptan vivir de una determinada forma no anulando su sentido de libertad, sino transformándolo y haciendo de la fortuna que Nussbaum trabaja, un concepto innecesario para su desarrollo.
Estesegundo grupo (que en el video que Shane Smith muestra está encarnado por los capataces de los campos de trabajo o los sensores del estado) acepta y contempla como positivo su forma de vida o los castigos impuestos por sus superiores. Estas personas han desterrado el imperativo kantiano que les posibilite algún sentido de justicia y han incorporado uno totalmente distinto. Incluso, dejando elaspecto racional un poco de lado, es evidente que el sentido de fortuna griega que Nussbaum trabaja, anclado en una forma de vida activa del hombre que genera el consecuente desarrollo emocional del mismo en conexión con los demás, aparece solo como una sombra. Lo primordial en ellos no es el desarrollo a partir de las emociones, nisiquiera de la razón; lo primordial son las vivas mecánicas al...