Corrientes Historiograficas- Annales
Hacia el inicio de del editorial del número inicial de la revista Annales, Marc Bloch y Lucien Febvre escribirían: “¿Una revista más, y los que es todavía importante, una revista de historia económica y social? Ciertamente, sabemos muy bien que nuestra revista, dentro de la producción francesa, europea y mundial, no es laprimera de su tipo. Pero creemos, no obstante, que al lado de sus gloriosos ancestros ella podrá tener su propio lugar especifico bajo el sol.” De hecho ninguno se equivocó al respecto. La revista alcanzaría renombre mundial y un enorme éxito dentro de las escuelas contemporáneas. En la actualidad muchos investigadores se sienten especialmente identificados con la corriente de Annales dadas susinnovaciones durante el siglo pasado, sin notar que muy probablemente esos avances que tanto los atraen ya no son más que momentos en la historia de la historia.
La renovación historiográfica resulta indispensable para aquellos investigadores que deseen mantenerse siempre a la vanguardia con sus trabajos. Resulta entonces impensable que alguien que aluda tener dichas metas continúe trabajandosobre las mismas bases que han dejado de estar actualizadas desde hace algunos años. Y no sólo eso, sino que además estaría actuando de manera opuesta a lo que predicaría según lo que encontramos en la carta de Lucien Febvre a Henri Pirenne. Al inicio de esta Febvre habla de una “reemplazar” una historia anterior a la de la guerra por una nueva: la Revue d’Histoire Economique et Sociale. Annalespues, representa un cambio, el antes y el después el cual inicia, primordialmente con Lucien Febvre y Marc Bloch.
Las nuevas concepciones históricas e historiográficas que se muestran entonces también están creadas en base a este último autor: Marc Bloch. En Apología para la historia o el oficio del historiador indicaría la verdadera importancia del hombre en la historia. En la relaciónhombre-naturaleza, Bloch señala que el mundo geográfico en sí no compete al historiador; un bosque, un lago o un volcán no son el objeto de estudio inherente del historiador, ni el pasado ni el presente lo son como tales, todo se resume al hombre. Pero también señala respecto al presente que es necesario el estudio del pasado para comprenderlo. Menciona “…que para explicar la tarde, bastaría conocer, a lomucho, la mañana.” Este es un punto de suma importancia, incluso en nuestros días. Si tomamos en cuenta el contexto histórico en el que Bloch vivió y escribió este libro, notamos la importancia del estudio del pasado, aún cuando este sea a corto plazo como el ayer. La Segunda Guerra Mundial se desarrollaba en ese punto histórico, los nazis habían tomado Francia y Boch se encontraba prisionero dada...
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