Corso de corsos

Cintya Bravo Tapia

Corso de corsos lo mejor del folclore uyu yuy

Apúrense, ya va a salir la flota, ¿donde estás?, un ratito, ya llega, son algunas de las frases que escuché antes de partirrumbo a la llajta querida para el recorrido del gran corso de corsos. Eran aproximadamente las 21:50 de la noche, y como siempre algunos atrasones no llegaban hasta la flota que nos llevaría a nuestronuevo destino, COCHABAMBA.
Te vas a cuidar, hijito no vas a tomar mucho si? , eran las recomendaciones que no podían faltar; llegó el momento de partir y al fondo de la flota se escucha: ¿y eltraguito?, otra vos responde, ¡ya, de una cuotas! a 30 pesos muchachos. Con la intención de pasarla bien tres chicos se bajaron del bus rumbo a comprar el dichoso traguito, pasaron alrededor de 15 minutos yse los ve entrar al bus con una caja de ron abuelo, del fondo una vos aguda grita, “uy no esto va a estar fuerte, yo me voy a dar” entre risas, cantos y bailes el viaje se nos hizo mucho más corto;“cuando un moreno cierra los ojos para no volver jamás, que lo sepulten en Oruro, morenada al compás”, llajuita, quirquiña y una sabrosa taquiña, que linda mi gente, mi gente de Cochabamba”, eran lasmelodías que mas se cantaban en la flota, siendo el deleite para unos y la molestia de no poder dormir para otros. Después de un largo viaje llegamos a nuestro destino, un poco cansados de no haber podidodescansar, nos acomodamos en los respectivos hoteles para así reponer energías para nuestra gran entrada al corso cochabambino.
Eran las 16:30 de la tarde hacia un calor infernal, más aun con lostrajes ya puestos, era imposible ponerse una refrescante camiseta y unos shorts para el tremendo calor que hacia en la llajta. Llegamos al punto de partida todos los bloques de los distintos departamentosya estaban esperando para hacer su paso por la gran entrada, fue en ese momento que al son de bombos y platillos empezaron a tocar la melodiosa melodía de los caporales San Simón.
En todo el...