creepypasta
Recuerdo vívidamente mi primer día, cuán aterrado estaba por hacer la jornada nocturna. Cuán intranquilo me ponía al caminar ese corredorlargo, oscuro y silencioso. Nunca se te olvida la frase que escuchas en tu primer día: «Vista abajo, sigue derecho».
Éste es un hospital bastante viejo y pequeño, diseñado para un tipo especial depacientes. Sin puertas, sin vidrio.
Sólo barras. De hecho, se cree que el pabellón en sí está encantado. Los pacientes describen a un «demonio» que merodea las celdas por la noche. Pero esto es sóloalgo que se les dice a los reclutas nuevos.
Hoy día puedo identificar cuáles reclutas se quedarán y cuáles no. Me intriga ver la manera tan fresca en la que reclutas nuevos manejan ciertassituaciones, y cuán apasionados son para rehabilitar lo innombrable. Necesitarás esa pasión que yo tengo.
No quiero entrar en detalles para respetar la dignidad de algunas personas, pero digamos que he vistoa más reclutas irse que quedarse.
En este momento me encuentro en mi jornada nocturna sólo con otro guardia, viendo los expedientes de los pacientes una y otra vez. Ésta es la parte aburrida. Megusta ordenar los fólderes según la gravedad de los crímenes. Se ha vuelto mi segunda naturaleza ahora; te podría enseñar algunos expedientes que fácilmente te harían estremecerte si fueras un reclutanuevo.
Estos pacientes están en mi pabellón. Son extremadamente frágiles, pero increíblemente peligrosos debido a sus crímenes. Si planeas ayudarlos, siempre debes tener eso en mente.
Tomo misllaves y me adentro en el infame corredor, cerrando la puerta tras de mí.
Está insoportablemente silencioso, y oscuro. La única luz sale de las pequeñas hendiduras que hay en cada celda. Ésta es la...
Regístrate para leer el documento completo.