CRIMEN EN LA NIÑEZ
A través de entrevistas y documentos penales, el autor narra las impactantes historias de una generación perdida que parece no tener futuro y que ha sustituido los juegos infantiles por armas mortales: se trata de menores de edad que han sido ignorados tanto por la sociedad como por el gobierno, y que han encontrado en la delincuencia la única forma de sobrevivir.
Eneste libro conmovedor, Julio Scherer documenta más de 40 casos de adolescentes criminales y ofrece diversas entrevistas en donde los menores reclusos hombres y mujeres cuentan cómo se iniciaron en el crimen y cómo han sido humillados por otros internos.
En algunos casos los testimonios reflejan su lado más humano, al expresar sus temores, deseos y arrepentimientos. Con el incisivo estilonarrativo y la maestría periodística que distinguen al autor, Niños en el crimen busca confrontar brutalmente al lector y, por supuesto, a una sociedad que prefiere cerrar los ojos
Rosalió Reta
A los doce años vendía droga en las calles de Texas y vivía con una mujer. Una de sus primeras declaraciones fue: “Sé manejar armas y explosivos. Fui adiestrado para usarlos.” Al salir, les dijo a susinterrogadores que regresaría a matarlos. A los veintitrés dijo que su paso por la delincuencia fue un error: Una tarde un amigo lo invitó a comer. Rosalió tenía curiosidad por las actividades de su amigo. Sin que nadie lo viera se escondió en el camión y de pronto se vio en un rancho en donde ejecutaban a 50 personas y las depositaban en tambos con aceite. “Si no quieres ser uno de ellos, dispara.”Rosalió tomó la .38 súper y disparó al hombre que se encontraba amarrado a una silla. Su primer homicidio. Durante seis meses soldados desertores, entre ellos un mercenario israelí, le enseñaron a disparar pistolas 9mm y cuernos de chivo, así como a defenderse en un mano a mano. “Pensé que era Superman. Me encantó hacerlo, matar a esa primera persona. Después trataron de quitarme la pistola, peroera como quitarle un dulce a un niño”.
Los actos delictivos cometidos por menores de edad se han incrementado hasta en 25 por ciento y son los de mayor violencia: homicidios dolosos y calificados, abusos sexuales, secuestros, corrupción y lesiones a terceros con armas de fuego o punzocortantes, incluyendo robo en lugares públicos, declaró Jesús Rodríguez Almeida, subprocurador de AveriguacionesPrevias Centrales de la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal.
Hoy Rosalió está acusado de al menos treinta muertes. Aunque no sabe con exactitud cuántas víctimas cayeron ante sus manos. Ganaba un sueldo semanal de 500 dólares y “bonos” hasta de 50 mil, cuando realizaba “trabajos especiales.” Sus premios eran autos deportivos de lujo y bolsas con cantidades generosas de cocaína. Suvida transcurrió entre el sur de Texas y un rancho en Tamaulipas. Su doble nacionalidad lo ayudaba a pasar desapercibido. Sobre los párpados lleva el tatuaje de unos ojos. Si duerme, te sigue viendo, sigue alerta. En mayo del 2006 fue detenido en el municipio de Santiago, Nuevo León, luego de participar en dos matanzas de narcos rivales de Los Zetas. "Me gusta lo que hago", dijo a la policía enuna confesión grabada en video. "Yo no lo niego".
Cerca de 30 mil menores participan en grupos de la delincuencia organizada, dedicados al secuestro, trata y tráfico de personas y extorsión, según cifras citadas por la Red por los Derechos de la Infancia, en el Informe alternativo sobre el protocolo facultativo de la Convención sobre los Derechos del Niño. Los adolescentes entre 14 y 17 años deedad son los que cometen más ilícitos.
A Reta lo buscaba la policía en Estados Unidos. Se trasladó a México, primero Nuevo Laredo y luego con Los Zetas a Monterrey. Ahí se integró a un grupo de jóvenes sicarios. Tenía prohibido dejarse ver y sin embargo una cámara de seguridad lo captó. Hay errores que se pagan caro. Lo llevaron a una finca de seguridad. Lo torturaron durante un rato. Fue buen...
Regístrate para leer el documento completo.