criticas de la canción vamos a portarnos mal calle 13

La fogosidad y la espontaneidad es algo que nos caracteriza como latinos, pero, ¿En qué punto termina la espontaneidad y comienza la grosería?
Es un contraste bastante fuerte,yo, como muchos otros,crecí en un hogar de padres extranjeros, donde no se come arepa todos los días y el pabellón nunca se cocina, lo venezolano que soy lo aprendí de mis amigosde infancia, de convivir con la sociedaden la que he crecido, hablar en tono moderado, no decir malas palabras, “portarse bien”, etc., era y sigue siendo el pan nuestro de cadadía en mi casa y nunca me he quejado de ello, pero ladiferencia es notable. Tal vez nuestro país no es tan pintoresco como otros del Caribe, hasta ahora los puerto riqueños meparecen excesivamente escandalosos, no sé si es algún tipo de carencia de atencióncolectiva por ser dependiente de los Estados Unidos de América en lugar de ser un paísindependiente o es solo el placer de ser chabacano y vulgar.
Históricamente todos los países como los conocemoshoy, vienen de una revolución social que busco liberarse de un yugo opresor,cayendo en anarquía y posteriormente una batalla independentista, la misma historia para todos, luego de esa anarquía secomenzó a construir una sociedad, que se baso en la que yaexistía simplemente con nuevo nombre, pero se creó una identidad propia. Como seres humanos llevamos la rebeldía en la sangre, por instinto nadiequiere ser oprimido o mandado,todos queremos que nuestra voz se escuche, pero esta rebeldía ¿A dónde nos puede llevar? Somos escandalosos, desordenados, groseros, consultamos la SUERTE para saber sinos vamos acasar o no, no nos importa si no tenemos un techo donde dormir pero compramos cerveza, decidimos ser así, porque decidimos que esto nos hace feliz, pero, ¿es realmente felicidad?