Cronica bus

CRÓNICA DE UN VIAJE EN BUS

Ante el reto de escribir una crónica y pensar en varias posibilidades finalmente me sedujo la idea de relatar aquellas cosas que suceden en el recorrido del bus buscando poner poesía a lo que por cotidiano se vuelve carente de sentido. Es increíble que ante la tarea de estudiar lo que sucedía en el recorrido podía recrear tantos instantes de la vida muchos sereshumanos que se cruzan en el mismo recorrido, desconocidos que se unen por un misma coincidencia.

Era miércoles 25 de septiembre, la tarde estaba un poco nublado para ser las 3:25 pm me encontraba con Ana en la Avenida Nutibara esperando el bus que me llevaría aquel lugar que anhele durante todo el día: mi casa. El bus rojo con blanco que ya era parte de mis rutinarios días pasó a las 3:30 pm,después de pagar el dinero exacto observamos dónde nos podíamos acomodar y al no ver sillas vacías próximas nos ubicamos en la parte de atrás, el bus estaba relativamente lleno, habían 11 mujeres y 3 hombres, lo cual me pareció curioso ya que se podía ver que el sexo dominante en los usuarios del bus era el femenino, pensé en el dicho de que por cada hombre hay 3 mujeres y vi como era comprobable enun lugar tan común como el bus.

De fondo en aquel acogedor lugar se escuchaba la emisora el sol y sentimos como la salsa cambiaba el ambiente, esta música le daba un toque alegre al recorrido lo cual pensé que lo haría más ameno ya que sabía lo largo de este y lo rutinario que se convertía hacerlo todos los días, sentada cerca a la ventana observaba la repetición del paisaje urbano que meacompañaba diariamente aunque ese día me inspiraba más temor porque era lúgubre y plomizo.

Siempre me he preguntado porque las personas prefieren viajar solas y elegir las sillas donde no hay alguien más, es como si encontraran en el silencio la tranquilidad para no salir de sus caparazones. Es como si el papel preferido de los usuarios del bus es el de ser espectadores silenciosos en busca de algúnelemento que los saque del monótono silencio y rompa con ese dialogo consigo mismo.

Bajando la Calle 33 se montaron 2 mujeres y una de ellas con ropa deportiva se ubicó en la silla que tenía a mi lado derecho observe como las mujeres por lo general siempre se están sosteniendo de algo bien sea de las sillas de adelante o de sus propios bolsos era algo curioso como que ahí encontraban seguridad,algo que los hombres no hacían porque la mayoría iba con los brazos cruzados o en las piernas.

Miré mi celular para ver la hora eran las 3:34 pm se montó una señora sin pagar y salta la registradora, pasó por cada puesto repartiendo unas barras de chocolate y después de que todos teníamos 2 en las manos comenzó a dar un breve discurso donde ofrecía 1 barra a $600 y 2 por $1000, después volvió arecorrer el bus viendo quien le compraba, en tanto eso pasaba miraba la actitud de mis compañeros de viaje algunos fastidiados, temerosos, indiferentes ante la situación y otros francamente descorteces. La historia de la vendedora no logro el impacto deseado y toda ella expresaba decepción, se bajó en la próxima parada dando las gracias con voz apagada y todos aliviados agradecían no tener queencontrarse frente a frente con la desdicha de otro.

Cuando el bus llegó a San Diego se baja un señor que ágilmente y sosteniéndose de una sola mano llega a la puerta sin mayor dificultad y detrás de él una señora que a pesar que se sostenía de todo lo que encontraba caminaba un poco torpe y tambaleaba hasta llegar a la puerta. Era impresionante como hasta en un bus los hombres tienen tantaagilidad y equilibrio.

En la Transversal Inferior se montó una mujer muy bien vestida y elegante le pago al conductor y antes de sentarse limpió la silla con un pañuelo abrió la ventana usando el mismo pañuelo y sacó de su bolso una cosmetiquera y mirándose en un pequeño espejo comenzó a retocarse. Era increíble la habilidad que tenía para maquillarse estando el bus en movimiento y a gran...