Cronica

“Una experiencia inolvidable”
Como una experiencia inolvidable he definido al grandioso viaje a Chaucha, en donde a más de compartir y ayudar a los más necesitados, pudimos disfrutar de hermosos paisajes y unirnos más con los compañeros de otros cursos.

Tres semanas antes comenzaron los ajetreos y buscamos la forma para conseguir el dinerito para comprar lo necesario para llevar, así quecomenzamos a vender sanduches, tortas, hot dog, canguil, gelatina, cubanos, jugo de coco, incluso hasta un encuentro de baloncesto realizamos; todos metimos mano en la realización de las canasta con víveres, en la clasificación de la ropa y en las fundas de caramelos.

Al fin llegó el sábado 19 de diciembre, justo a las 06:00, comenzaría el viaje hasta chaucha lugar donde acudiríamos a entregarvíveres, ropa, fundas de caramelos, juguetes y un poco de alegría.

Siendo las 6:15 el entusiasmo crecía y el autobús que nos llevaría hasta dicho lugar no llegaba, confundiéndonos casi de bus, mientras esperábamos ansiosos por la salida, la lluvia y el frío nos cobijaban.

Al fin 6:30 el bus con destino a chaucha llegó, pero las esperanzas desaparecían ya que tan solo 8 fueron los afortunados quelograron conseguir un puestito, los mismos que enseguida emprendieron el viaje.

Ya eran las 7: 15 y todavía el resto de viajeros no habíamos salido, el entusiasmo se hacía cada vez más grande, hasta que al fin siendo las 7:35 logramos emprender tan añorado viaje.

El viaje no fue tan placentero por el camino que nos acompañó hasta llegar a nuestro destino. Los paisajes realmente eran dignosde fotografiar, y sin darnos cuenta la primera parada llegó, Soldados, en este pueblito pudimos disfrutar de una deliciosa trucha recién sacada del lago y casi viva.

Siguiendo el camino los paisajes seguían impresionando a quien los admiraba, hasta que siendo las 10:30 llegamos al fin a San Antonio, en donde la gente estaba ya esperándonos; en la “Casa Comunal” de dicho lugar se guardarían todaslas cosas que habíamos juntado, de este lugar cada grupo ya designado saldría rumbo a una comunidad.

Poco a poco los diferentes grupos salían con sus respectivos guías, mientras las pequeñas mulas llevaban todo el peso; seguidamente los que aún no habíamos salido nos dirigimos ha San Gabriel siendo las 12:30, en donde otros grupos seguían saliendo rumbo a las comunidades.

Las 13:00 marcabami reloj y mi grupo no salía todavía, nos embarcamos en el camión de la policía encima de ropa, juguetes y víveres, durante el camino hacia nuestra comunidad, el resto de compañeros se iba quedando, hasta que nuestro profesor guía nos dijo: “Los que se quedan para irse a Baños Yunga”, ahí fue que al fin nos tocaba dejar el camión para emprender el viaje a caballo hasta la comunidad.

Guardar entalegos los presentes que llevamos y cargarlos en la mula fue el trabajo de las personas que nos esperaban con entusiasmo desde las 9:00. Una vez que todo estuvo listo y siendo las 14:05 nos montamos en el caballo y el viaje empezó, las personas que nos esperaron durante más de cinco horas no se mostraron nada cansados y siempre estuvieron mostrándonos una sonrisa.

Luego de haber estado encaballo más de una hora los estragos del viaje se comenzaron a sentir, mi compañero que nunca antes había tenido la oportunidad de montar, lo único que decía era: “Me estoy estropeando el negocio”, mientras todos nos reíamos.

Cabalgar es una cosa y estar durante más de tres horas sentados en el caballo es otra muy distinta y más aún si por el camino que vas solo esta lleno de huecos y lodo, ese fuenuestro caso, pero todo esto se compensaba con el entusiasmo con el que nos dirigíamos a nuestra comunidad.

Una estupenda caída fue la que me propicie cuando mi caballo (según el dueño el más seguro) pegó el salto del siglo y me mandó volando hasta el lodo, todos los que estuvieron en ese momento no tenían estomago para reírse más.

Desde lejos veíamos la escuela a la que teníamos que...