Cruzando el umbral de la esperanza

Páginas: 221 (55100 palabras) Publicado: 10 de noviembre de 2013
CRUZANDO EL UMBRAL DE LA ESPERANZA
AUTOR: JUAN PABLO II
Indice

• Introducción general
1.- El Papa: Un escándalo y un misterio
2.- Rezar: cómo y por qué
3.- La oración del "Vicario de Cristo"
4.- ¿Hay de verdad un Dios en el cielo?
5.- Pruebas, pero ¿Todavía son válidas?
6.- Si existe, ¿por qué se esconde?
7.- Jesús-Dios: ¿No es una pretensión excesiva?
8.- La llaman historia de laSalvación
9.- Una historia que se concreta
10.- Dios es amor. Entonces, ¿por qué hay tanto mal?
11.- ¿Impotencia Divina?
12.- Así nos salva
13.- ¿Por qué tantas religiones?
14.- ¿Buda?
15.- ¿Mahoma?
16.- La Sinagoga de Wadowice
17.- Hacia el dos mil en minoría
18.- El reto de la Nueva Evangelización
19.- El joven: realmente una esperanza
20.- Érase una vez el consumismo
21.- ¿Sólo Romatiene la razón?
22.- A la búsqueda de la unidad perdida
23.- ¿Por qué divididos?
24.- La Iglesia a Concilio
25.- Anómalo pero necesario
26.- Una cualidad renovada
27.- Cuando el Mundo dice No
28.- Vida eterna: ¿todavía existe?
29.- Pero, ¿Para qué sirve creer?
30.- Un Evangelio para hacerse hombre
31.- Defensa de cualquier vida
32.- Totus Tuus
33.- Mujeres
34.- Para no tener miedo35.- Entrar en la esperanza








CRUZANDO EL UMBRAL DE LA ESPERANZA

-INTRODUCCIÓN

SOBRE ESTE LIBRO

UN TELEFONAZO
Siento un especial afecto, naturalmente, por los colegas -periodistas y escritores- que trabajan en la televisión. Por eso, a pesar de repetidas invitaciones, nunca he intentado quitarles su trabajo. Me parece que las palabras, que constituyen la materia prima denuestro quehacer, tienen consistencia e impacto diferentes si se confían a la «materialidad» del papel impreso o a la inmaterialidad de los signos electrónicos.

Sea lo que sea, cada uno es rehén de su propia historia, y la mía, referente a lo que aquí importa, es la de quien ha conocido sólo redacciones de periódicos y editoriales, y no estudios con cámaras de televisión, focos, escenografía.Tranquilícese el lector: no voy a seguir con estas consideraciones más propias de un debate sobre los medios de comunicación, ni deseo castigar a nadie con desahogos autobiográficos. Con lo que he dicho me basta para hacer comprender la sorpresa, unida quizá a una pizca de disgusto, provocada por un telefonazo un día de finales de mayo de 1993.

Como cada mañana, al ir hacia mi estudio, merepetía interiormente las palabras de Cicerón: Si apud bibliothecam hortulum habes, nihil deerit. ¿Qué más quieres si tienes una biblioteca que se abre a un pequeño jardín? Era una época especialmente cargada de trabajo; terminada la corrección del borrador de un libro, me había metido en la redacción definitiva de otro. Mientras tanto, había que seguir con las colaboraciones periodísticas desiempre.

Actividad, pues, no faltaba. Pero tampoco faltaba el dar gracias a Quien debía darlas, porque me permitía sacar adelante toda esa tarea, día tras día, en el silencio solitario de aquel estudio situado sobre el lago Garda, lejos de cualquier centro importante, político o cultural, e incluso religioso. ¿No fue acaso el nada sospechoso Jacques Maritain, tan querido por Pablo VI, quien, medio enbroma, recomendó a todo aquel que quisiera continuar amando y defendiendo el catolicismo que frecuentara poco y de una manera discreta a cierto «mundo católico»?

Sin embargo, he aquí que aquel día de primavera, en mi apartado refugio, irrumpió un imprevisto telefonazo: era el director general de la RAI. Dejando sentado que conocía mi poca disponibilidad para los programas televisivos,conocidos los precedentes rechazos, me anunciaba a pesar de todo que me llegaría en breve una propuesta. Y esta vez, aseguraba, «no podría rechazarla».

En los días siguientes se sucedieron varias llamadas «romanas», y el cuadro, un poco alarmante, se fue perfilando: en octubre de aquel 1993 se cumplían quince años del pontificado de Juan Pablo II. Con motivo de tal ocasión, el Santo Padre había...
Leer documento completo

Regístrate para leer el documento completo.

Estos documentos también te pueden resultar útiles

  • Umbrales de esperanza
  • El Umbral De La Esperanza
  • umbrales
  • umbral
  • UMBRALES
  • Umbral
  • Umbral
  • umbrales

Conviértase en miembro formal de Buenas Tareas

INSCRÍBETE - ES GRATIS