en los condados, responsables del mantenimiento de la paz pública, de la recaudación de impuestos, del reclutamiento de arimanni para el servicio militar y de la administración de justicia30 31 32 civil y criminal, en especial los relativos a la propiedad. Cada condado estaba subdividido en distritos más pequeños, en los que los scabini, sometidos al control del conde, se encargaban de pequeñosdelitos y pleitos de índole personal. Los condes carolingios fueron pues, sucesores de los duques y gastaldos lombardos en gobernar los distritos del reino. En zonas fronterizas se constituyeron distritos militares para la defensa del territorio denominados marcas y formados por la agrupación de condados, bajo el mando militar del marqués.33 34 El título ducal se mantuvo para los gobernadores deEspoleto y Friul, alternándose o uniéndose al de marqués para resaltar la responsabilidad de gobierno en territorios fronterizos.35 En el reino de Italia, como territorio fronterizo, se constituyeron varias marcas: la marca de Friul —ampliada con Istria en 803—36 tenía como cometido enfrentarse a eslavos y ávaros y fue ampliada a mediados del siglo X con Trento para formar la marca de Verona, lamarca de Toscana para contrarrestar las razias sarracenas procedentes de Cerdeña, o la marca o ducado de Espoleto para la defensa contra los lombardos del sur o los musulmanes procedentes de Sicilia.37 38 A finales del siglo IX, en época de Guido de Espoleto, en el oeste del reino se constituyeron la marca de Ivrea y la marca de Lombardía39 para hacer frente a los sarracenos de Fraxinetum;40 peroesta última fue ensombrecida por el poder del arzobispo de Milán.41 Al ser funcionarios públicos, los condes o marqueses no estaban necesariamente en relación de vasallaje respecto del soberano, pero como la administración central se mostró incapaz de mantener una burocracia de agentes al servicio del rey, remunerados y revocables, estos agentes tendían a ser escogidos entre una poderosa clientelamilitar a los que se recompensaba con tierra, ante la escasa circulación monetaria.24 El rey trataba de asegurarse que los oficios públicos de conde, duque y marqués, sin perder su carácter público, también vieran reforzados su sumisión al poder regio a través del servicio de vasallaje, a cambio de un beneficio de las tierras del fisco.42 Así pues, los monarcas carolingios confiaron laadministración del reino a estos mismos nobles que se les habían encomendado personalmente bajo un vínculo de fidelidad y a los que se les otorgaba beneficios territoriales a cambio de contar con su fidelidad y su apoyo militar al aportar una mesnada. La actividad de los funcionarios públicos siguió siendo esencialmente un poder militar para suprimir la violencia privada.
El abuso de poder de los funcionariospúblicos en beneficio de sus intereses particulares se producía sobre los campesinos y creaba conflictos con los arimanni y con aquellos señores laicos y eclesiásticos sin vínculos de amistad con los nobles detentadores del poder público.43 Para contrarrestrar a los condes, el rey también contaba con la ayuda de sus vasallos, los vassi dominici, encomendados personalmente a él,44 a cambio de queel rey les garantizara el beneficio de territorios procedentes de la propiedad regia y eclesiástica. Los vassi podían reclutar sus propias tropas para el ejército del rey y no estaban sujetos a las órdenes del conde.45 Además de los vassi dominici, el soberano empleaba el orden eclesiástico para supervisar a los funcionarios públicos, controlar ciudades y rutas de comunicación, y obtener obedienciadel pueblo, y a su vez empleaba a leales para el gobierno de abadías y obispados,46 seleccionados de entre la misma aristocracia militar, y que eran recompensados con donaciones a la Iglesia y con inmunidades.24 La necesidad de que el rey contara con el poder eclesiástico produjo en la Italia carolingia el desarrollo de la inmunidad (mundeburdium) a obispos y abades, de modo que ningún...
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