Cualquiera

Páginas: 5 (1166 palabras) Publicado: 13 de marzo de 2013
Segundo Artículo: Dios el Hijo

Lección 3

Jesucristo, El Gran Profeta
Palabras Claves
salvación
esclavitud
profeta
Antiguo Testamento
Nuevo Testamento

Lecturas Bíblicas
Deuteronomio 18:15-19
S. Lucas 4:14-30
¿Te acuerdas de la historia de Moisés? Cuando Moisés era bebé, el Rey de Egipto
mandó matar a todos los niños de los Israelitas que vivían en Egipto. Exigía que losarrojaran al río. La mamá de Moisés lo puso en el río—pero en una canasta que
flotaba como barquito, y después Moisés fue rescatado por la hija del mismo rey. La
princesa lo adoptó, y creció en la casa del rey. Llegó a ser un Príncipe de Egipto. La
Biblia nos dice que Moisés fue un niño muy especial, porque Dios tenía un plan para su
vida. Dios lo escogió para liberar a su pueblo, Israel, de laesclavitud en Egipto y
después guiarlo hasta la tierra que Dios les había prometido.
Moisés no sólo fue el líder del pueblo de Dios. También era un
profeta. Un profeta es una persona que habla de parte de Dios.
Dios le daba sus palabras a Moisés, y luego Moisés explicaba al
pueblo lo que Dios había dicho. En aquellos días la gente no tenía
Biblias, porque la Biblia no se había escrito todavía. LaBiblia fue
escrita por los mismos profetas, como Moisés, Isaías, y Jeremías, y
por los Apóstoles, como Pedro, Juan, y Pablo. Todos ellos
recibieron de Dios las palabras que después escribieron.
En nuestra lectura del Antiguo Testamento, Moisés está diciendo a la
gente, “Algún día, Dios va a mandar a otro profeta, quién será como yo,
pero aun mayor que yo. Este profeta les enseñará todo loque necesitan
saber acerca de la salvación de Dios. Cuando Él venga, no dejen de
hacerle caso a Él.” Con estas palabras, el profeta Moisés hablaba acerca
de Jesucristo, que fue el profeta más importante de todos, porque Él mismo
era Dios, que vino a hablar personalmente su Palabra a nosotros.

© Copyright derechos reservados 2005 AFLC Asociación de Congregaciones Luteranas Libres

1

Enla otra lectura Bíblica, la del Nuevo Testamento, leemos que cuando Jesús vino,
entró en la Sinagoga de su pueblo de Nazaret, donde había vivido cuando era niño en
la casa de José y María. Jesús se levantó para hacer la lectura. En aquel día, la
lectura Bíblica que tocaba leer era del libro del profeta Isaías, y trataba de la venida del
Mesías, el Salvador que Dios había prometido. Cristo leyódonde decía que Dios
enviaría al Mesías para predicar el Evangelio -- las buenas noticias acerca de la
salvación de Dios, y de cómo este Salvador libraría a la gente del pecado y sanaría a
los enfermos también. Cuando terminó la lectura, Cristo se sentó, y dijo, “La verdad es
que ahora esta Escritura se ha cumplido.”
La gente sabía que Jesús estaba diciendo que Él era el Salvador que Dioshabía
prometido enviar; ¡que Él era Dios hecho hombre y venido a la tierra! Él era el gran
profeta que Moisés también les había dicho que debieran escuchar. Pero en lugar de
hacerle caso, se enojaron y no quisieron escuchar lo que Él les decía sobre el mensaje
de la salvación.
La gente de su mismo pueblo, que habían sido sus vecinos, quiso
tirarlo de un barranco, porque no creían que Él fuerael Salvador que
Dios había enviado. Pero Jesús caminó por en medio de la multitud y
se fue de allí. La gente se quedó con su pecado y siguieron viviendo
lejos de Dios.
Ahora tenemos Biblias y podemos leer el mensaje de Dios en
cualquier momento. Podemos ir a la clase bíblica y a los cultos
de la Iglesia, y aprender la Palabra de Dios. Podemos leer las
palabras que nos dijo Jesús, el profetamás grande de todos, y
saber lo que Dios mismo nos dice a nosotros.
Pero aún ahora, cuando Dios en su Palabra dice a la gente que son pecadores y que
necesitan a un Salvador, muchos se enojan. Muchos se ponen tercos y no quieren
decir, “Yo soy un pecador y no he obedecido los mandamientos de Dios. Yo necesito
que Cristo me perdone.”
¿Escuchas tú cuando Dios te habla en su Palabra? Cuando...
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