Cuanto queda de aquello

¿Cuánto queda de aquello?:
Ecos coloniales en tiempos republicanos
―¡Profesor, es necesario integrarlos!; ¡profesor, ellos tienen que aprender el español
pues es la lengua oficial del Perú!, ¡profesor no es posible que ellos se encuentren en
una situación de total abandono por parte del Estado!‖

Como académico, soy un convencido de que los textos de historia constituyen relatos acerca delpasado. Sin negar los importantes aportes teóricos y metodológicos que durante el siglo XX
revolucionaron la disciplina histórica, el producto final de toda investigación se expresa, de un
modo u otro, a través de narraciones con importantes contenidos explicativos y analíticos.

Es por ello que acerca de una sola temática pueden existir posiciones antagónicas, lo que
demuestra que la historia no tratanecesariamente de la verdad. Ciertos son los acontecimientos
recreados, pero las palabras, frases e interpretaciones con los que los conectamos reflejan,
finalmente, nuestra particular descripción del pasado que evocamos. 1

Así, la elaboración de un ensayo para responder las inquietudes de mis alumnos y las mías
propias acerca de la evolución de la sociedad peruana en tiempos republicanos ha sidouna
experiencia enriquecedora. Para comenzar, la utilización del género ensayístico nos proveyó un
modelo con la flexibilidad necesaria como para plasmar nuestras inquietudes en estas páginas.

Por ello también, este trabajo constituye una reflexión que, a grandes rasgos, discute la temática
que nos ocupa y revisa los tópicos historiográficos más difundidos que la han referido. En tal
sentido, elpresente estudio ha centrado su análisis en algunas síntesis de historia republicana

1

Regalado de Hurtado, Liliana El rostro actual de Clío. La historiografía contemporánea: desarrollo, cuestiones y
perspectivas Lima, PUCP - Fondo Editorial, 2002. pp. 52-75. La autora discute y analiza in extenso el debate acerca
de la narratividad de la historia y las diferentes posiciones que existen sobreel particular.

publicadas en las últimas dos décadas, sin por ello descuidar la revisión de otras investigaciones
más especializadas, acerca de temáticas específicas que despertaron nuestro interés.

2

A nosotros nos llamó la atención constatar que en nuestro público objetivo -la colectividad en
general y el alumnado en particular- persiste una representación estamental de la sociedad
peruanaque no se corresponde necesariamente con la situación presente. Nos motivó también el
convencimiento de que la historiografía que trata el periodo republicano, y los contenidos de los
textos de divulgación que lo recrean, requieren examinarse a la luz de los horizontes
académicos que se abrieron paso en las últimas dos décadas.

En el entendido de que los tiempos de la bipolaridad mundial generaronposiciones encontradas
en el ámbito intelectual, consideramos urgente la revisión sugerida, lo que implica también la
puesta en valor de los aportes más notables de la producción historiográfica pasada.

Nosotros y los otros

Las intervenciones que reproduzco en el epígrafe de este ensayo denotan que en el Perú existe
un ―ellos‖ que se opone a un ―nosotros‖. El indígena de la sierra, el nativo dela selva, el
campesino rural andino, el shipibo, el aymara, entre otros, refieren, en la percepción de muchos,
al ―otro‖ de nuestra sociedad. Este ―otro‖ es percibido como distinto del ―nosotros‖ que
conforman los peruanos hispanohablantes, citadinos y más o menos adheridos al bagaje cultural
y tecnológico occidental.

Es por ello que la alteridad -entendida como el saberse uno en la medida en queexiste otro
distinto- aparece como un elemento fundamental en la manera como cada individuo nacido en el
país imagina su lugar en la sociedad y delinea la identidad personal.3
Hace casi 500 años, la Corona española dividió la sociedad colonial en dos Repúblicas – de
indios y de españoles – e instauró la figura legal de las castas para también clasificar a aquellos
que provenían del mestizaje...